Según informó TN, fueron minutos de mucha tensión en el Club Alvear de Parque Avellaneda entre dos facciones de La Guardia Imperial. Miembros de la barra disidente de Racing irrumpieron en un asado que realizaban personas de la facción oficial y la historia terminó a los tiros, con corridas, golpes y dos heridos: uno de ellos fue trasladado al Hospital Piñero por "politraumatismos", pero ya fue dado de alta.

A esa hora y en las mismas instalaciones, finalizaba un partido por la categoría Senior entre Comunicaciones y All Boys. Marcelo Blanco, jugador del club de Floresta, relató lo vivido: "Cuando nos retirábamos para el vestuario se escucharon los tiros. Nos dijeron que nos quedemos dentro del club porque había muchos tiros y un enfrentamiento entre las barras", dijo en diálogo con TN.

"Los que iban entrando lo hacían muy asustados. Es una situación que no se vive todos los días", continuó Blanco y agregó: "Estuvimos encerrados 20 minutos, media hora. Después apareció la policía y se calmó todo".

Finalmente, aclaró que no vieron nada porque todo pasó en un sector distinto al que ellos se encontraban. "Fue un hecho aislado de gente que nosotros ni sabíamos que estaban ahí", concluyó.