El pase de Silvio Romero a Independiente se estancó por un conflicto de intereses entre los empresarios que participan de la operación.

¿Cómo es la historia? Si bien el “Rojo” y el América de México habían alcanzado un acuerdo, la dirigencia de Independiente negocia activamente con el intermediario Nazareno Marcollese en lugar de avanzar con Gonzalo Paz, el agente del jugador.

El representante de Romero aseguró que hace al menos 48 horas que no recibe ningún tipo de comunicación. Paz se encuentra en Barcelona, tratando de cerrar la llegada de Facundo “Chucky” Ferreyra al Espanyol. Independiente necesita solucionar un conflicto que llega a USD 1 millón de dólares en comisiones de acuerdo a las fuentes consultadas por “Doble Amarilla”.

Quien encabeza la negociación por Independiente es “Yoyo” Maldonado. La de Romero es la tercera gestión que se le complica al equipo que entrena Ariel Holan en los últimos días por acciones confusas de la dirigencia.

Primero fue el caso de Fernando Gaibor, de Emelec. La directiva del club ecuatoriano manifestó que sus pares argentinos les habían cambiado las condiciones del acuerdo original sobre un papel membretado.  Fue el propio Holan quien reflotó la llegada del mediocampista luego de una charla con el titular de la entidad “eléctrica”. Luego, se cayó el arribo de otro ecuatoriano, Bryan Cabezas, porque en el envío de documentos, entre otros errores, el nombre del futbolista apareció traducido como Bryan Heads (cabezas en inglés).Y ahora se suma el episodio Romero al no tratar a fondo con el agente del jugador y recurrir a un intermediario.

"Doble Amarilla" pudo confirmar que Romero sigue en México y solamente responde a las órdenes de su representante. Y, además, que volvió a comunicarse con Marcelo Gallardo días antes del cierre del libro de pases y que no está descartada su llegada a River en junio si no firma con Independiente.