A mediados de junio la tan dilatada salida de Gustavo Bpu de Racing se terminó dando. A fuerza de goles y entrega, el delantero se había ganado la chance de emigrar al exterior en busca de un contrato jugoso que le permita dar un paso adelante. Y de paso, engrosar su cuenta bancaria con el famoso 15% de la transferencia. Xolos lo quería. Racing lo vendía. Y todos felices. 

Pero lo que pareció ser, en cierta medida no parece haber sido. Es que en las últimas horas en el Boletín de AFA se confirmó que el jugador se fue a préstamo al elenco mexicano. “Con cargo y con opción”, dice el texto. 

Entonces, ¿Quién tiene razón? ¿Los mexicanos que afirman haberlo comprado luego de que los dirigentes de Racing hayan contado (en on y en off) que lo habían vendido; o el Boletín de AFA? La verdad, parece ser esta: Racing lo da a préstamo por un año, a cambio de 4 millones de dólares, y la opción de compra en junio del año que viene es de 2 millones. ¿Cómo? Los números no cierran, pero todo tiene un por qué. En Racing buscan desprenderse del jugador solamente cuando desde México hayan abonado los 6 millones de dólares que pretenden por el pase. Así, en primera instancia, se aseguran cuatro millones, y si no los pagan, el player vuelve al Cilindro. Si Xolos hace uso de la opción, antes del trasnfer definitivo, deberá haber abonado los cuatro millones del préstamo y los dos de la opción. Así, Racing se asegura no perder. 

Pero es sólo una cuestión de cobro. No. La medida también hace que el club no pague tantos impuestos ahora y patea el pago para más adelante. Un clásico diferimento impisitivo