Thiago Monzón, capitán del Liniers campeón del último torneo de la Primera D, habla en exclusiva con Doble Amarilla y cuenta cómo es jugar en la divisional más inferior del fútbol argentino. Las vivencias y el cambio de llegar a la C. “Te transformás en profesional, tenés obra social y todo, por eso es un cambio muy grande”, se sincera el jugador.

- DOBLE AMARILLA: ¿Cómo son estos días después de haber sido campeón y ascender?

- THIAGO MONZÓN: Ahora ya más relajado y descansando con la familia, sabiendo que cumplimos con el objetivo que teníamos y pensando en lo que viene, ya arranca otro campeonato en la C con distintos equipos y en otras canchas, siempre tratando de mejorar como grupo y equipo para estar preparados para estos desafíos.

- DA: Estás desde inferiores y hoy sos capitán, ¿es especial para vos ascender con Liniers y notas un cambio en el club?

- TM: Cambio demasiado, le decía al presidente justamente eso que veo nuevas construcciones, con las plateas y en la cancha también, pero también veo cambios en los jugadores. Yo vengo de inferiores y cuando empecé nada era parecido a lo que es ahora. Todo era más precario y no había materiales y hoy por suerte podemos tener a un utilero que se encarga de todo y trabajamos con materiales buenos y me parece que Liniers es un equipo que ya tenía que dejar la D y creo que bien merecido tenemos el ascenso y además creo que en la C la institución va a cambiar mucho

- DA: ¿Y futbolísticamente crees que también hubo un avance en la categoría?

- TM: Demasiado, hoy la mayoría los equipos de la D intenta jugar, no todos pero la gran mayoría si y ya no es como antes que era mas potrero que otra cosa. Hoy los DT te hacen jugar al fútbol y eso es bueno porque de otras categorías más arriba te ven y preguntan por tal jugador. Dejó de ser fútbol potrero por suerte y a nosotros nos favoreció que vino Cabello y nos enseñó a no revolear, lo que era ese juego típico de la D y ahora César potenció ese juego porque veníamos con la idea y eso nos hizo lograr el objetivo porque hemos sido un equipo que tuvo una seguidilla linda de triunfos y eso fue fundamental.

- DA: ¿Qué sacrificios hace un jugador de la categoría para hacer lo que le gusta?

- TM: Muchísimos, tenes que dejar de lado muchas cosas como la familia, tu mujer y hay que hacerles entender que te vas todo el domingo y si pierdes llegas amargado porque no se dan los resultados o cosas así. Quizás trabajas a la tarde o estudias como muchos de mis compañeros hasta altas horas de la noche y al otro día de vuelta a entrenar, por eso digo que el sacrificio del jugador de la D es enorme por eso ascender es importante porque te volves un jugador profesional y todo ese esfuerzo que hiciste pasa a valer mucho más aún porque tenes por ejemplo obra social y demás, al jugador le cambia mucho el panorama.

- DA: ¿Cómo es esa situación de los compañeros que trabajan?

- TM: Tengo varios que estudian por ejemplo educación física, trabajan en colonias y muchos además trabajan en fábricas y se banca muchísimo el calor. Uno ve el esfuerzo de sus compañeros y lo valora, acá se trata mucho del sacrifico que hacen y la responsabilidad con la que se toman todo esto, por eso hemos logrado el objetivo también.

- DA: ¿El hincha igualmente te exige como un profesional?

- TM: El hincha te pide como siempre, pero nosotros lo hacemos siempre por la familia. Cuando miramos a la tribuna, son ellos los que están bancando y son los que nos dan fuerza. Al salir a la cancha, los miramos y tomamos fuerzas por ellos que son los que siempre acompañan.