El entrenador de Brown de Adrogué, Pablo Vicó, explicó cómo vivió su caso infeccioso por coronavirus y aseguró que pasó por “los peores diez días” de su vida. Tras recibir las dos dosis para combatir a la enfermedad, reveló: “Alberto Fernández se quiso sacar una foto conmigo”.

El DT conversó con Radio Mitre luego de la derrota del viernes ante Ferro por 1 a 0 en Caballito, por la reanudación de la Primera Nacional, tras algunas semanas de inactividad por el COVID-19.

Sobre su actualidad en el club, manifestó: “Llevo 13 años en primera división de Brown de Adrogué y 24 años en total en el club, algo no creíble. Esto no es mérito mío solamente, sino de una comisión directiva que tuvo un proyecto. Nosotros no vamos a bajar los brazos hasta dirigir en Primera”.

A su vez, aseguró que estuvo “muy cerca de dirigir Huracán”, pero que “(Christian) Bragarnik llevó a su gente” y finalmente no tuvo “esa suerte”. “Dirigir a Huracán sería un sueño espectacular”, aseguró.

Por otra parte, contó cómo fueron sus días en 2020 en el club, donde hubo una cuarentena estricta: “La pasé muy triste, estuve 178 días encerrado acá en la cancha, con el utilero. El no poder abrazar a tu hija, no poder estar con mis nietos...”.

“Tuve Covid, pero no tuve miedo, no tenía conciencia de lo que estaba viviendo, pasé los peores diez días de mi vida”, agregó.

Por último, contó que recibió las dos dosis contra el coronavirus y que eso le “cambió la vida”. Además, tras conocerse la noticia, contó un detalle particular: “Alberto Fernández se quiso sacar una foto conmigo”.