Rafael Iglesias, que formó parte del equipo de Godoy Cruz que consiguió el ascenso al Nacional B en 1994, fue denunciado semanas atrás en la Oficina Fiscal Nº1 por una empleada de la Liga Mendocina. La misma (de la cual se reserva su nombre por protección), aseguró que era acosada con mensajes y el día del sorteo de la Copa Mendoza realizada en la sede de la Liga, fue abordada físicamente.

Según lo determinó el fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Darío Nora, quién evaluó diferentes testimonios y pruebas, la imputación formal es bajo el carácter de "abuso sexual simple". Además, el magistrado determinó que Iglesias no se acerque a la víctima, ya que continúa en libertad porque se trata de un delito excarcelable. La posible pena va de seis meses a cuatro años de prisión. 

El caso sin dudas generó una gran consternación en la comunidad futbolística mendocina. La primera acción que tomó la Liga madre de aquella provincia fue emitir un comunicado donde exponía que se abría un sumario administrativo interno y que Iglesias quedaba suspendido preventivamente.

Tweet de Liga Mendocina de Fútbol

Desde la LMF le dijeron a Doble Amarilla que "acompañarán cualquier resolución de la justicia en el proceso penal y están a total disposición mientras avanzan con la investigación puertas adentro de la entidad". El resultado del sumario iniciado podría derivar en la expulsión. Además, Iglesias es presidente del Club Social y Deportivo La Gloria y empleado de la Municipalidad de Godoy Cruz.

Los próximos pasos de la causa consistirán en continuar recavando pruebas, testimonios y el inicio de las pericias psicológicas para los actores involucrados.