En la jornada en la que la violencia alrededor del fútbol se cobró una nueva víctima, en Tucumán, un hecho policial preocupa a todo el ambiente del deporte que más le gusta a los argentinos. Luego del encuentro entre Nueva Chicago y Almagro, parte de la parcialidad del local se enfrentó con la Policía, con un saldo de varios detenidos y heridos.

Finalizado el cotejo en el que el 'Torito' cayó en su estadio ante Almagro (perdió 2-3 un encuentro que ganaba por 2-0) los hinchas de la institución de Mataderos "bajaron y se dirigieron a los fenólicos de Carhue en busca de los colectivos visitantes. Personal policial se posicionó para evitarlo" le confirmaron a Doble Amarilla fuentes policiales sobre el origen de la batalla campal.

Los disturbios comenzaron a la salida del estadio debido al descontento de los simpatizantes de Nueva Chicago, según le confiaron fuentes de Seguridad a este medio. Las mismas agregan que algunos de los agresores subieron a un micro y fueron detenidos mientras cruzaban hacia la Provincia. 

En la intersección de las calles Justo Suárez y Cárdenas es donde se registraron los incidentes más violentos. Según fuentes policiales, al menos 15 efectivos resultaron heridos por los objetos contundentes arrojados por los hinchas de Chicago. Fueron derivados al Hospital Santojanni, Álvarez y Grierson con múltiples politraumatismos. Uno de ellos sufrió un traumatismo de cráneo con pérdida de conocimiento (en observación y con tomografías) y una mujer debió ser trasladada por la fractura expuesta en su mano.

En lo futbolístico, Chicago sufrió una derrota que lo pone de cara al tan temido descenso. Pero en lo institucional, quedó un clima de tensión y escalada de violencia que preocupa a todos aquellos que disfrutan del fútbol.