El entrenador de la Selección de Uruguay, Óscar Washington "Maestro" Tabárez, aseguró que no dejará su cargo y que peleará hasta el final por la clasificación al Mundial de Qatar 2022. "No considero irme tirando la toalla", declaró. Hubo algunas críticas indirectas a la prensa y los dirigentes.

El conjunto charrúa fue goleado 3-0 por Bolivia en La Paz y se alejó de los puestos de clasificación, incluso del siempre complicado repechaje. Tabárez, ya discutido en la previa, en esta doble fecha sacó 0 puntos de 6. Además de la derrota con el conjunto boliviano, cayó en su tierra ante la Selección Argentina.

"No es un momento de hablar mucho, todos habrán visto lo que pasó. Nosotros esperábamos algo distinto en nuestro cálculo de probabilidades. No hay otra cosa que mirar hacia adelante, que el tiempo haga lo suyo y sacar las conclusiones de este período. En la medida en que no aparece un resultado positivo, todo lo bueno que se ha hecho no se reconoce. No podemos entrar en eso, ni quedarnos en el estado en el que estaba el vestuario: una gran desazón. Yo estoy así también", comenzó expresando en conferencia de prensa.

Tweet de Juan Pablo Romero

En cuanto a lo que viene, planteó: "Ahora son cuatro partidos que quedan, cada vez depende menos de nosotros, pero de la parte de la que nos podemos ocupar lo haremos para ver cómo hacemos para tener una mejor expresión".

El entrenador uruguayo reconoció que el resultado fue justo y que no pudieron contener la ofensiva boliviana, que contó con la ventaja de la altura.

"Recién para el año que viene es el reinicio y yo creo en estos jugadores. Lo único que queda es mirar para adelante y seguir peleando. La manera de revertirlo va a depender de un pensamiento y de salir del momento en el que estamos. No estamos acá para dar explicaciones. Para muchas cosas que pasaron no tenemos soluciones mágicas", agregó.

Y por último, con cierto enojo, descartó una posible salida: "No, porque yo soy un profesional de esto, tengo contrato y ahí dice todo lo que tengo que hacer. Ese tipo de decisiones se toman a otro nivel y se respetarán como se hace siempre, porque no sé quién me puede exigir eso a mí. Sobre todo después del tiempo de trabajo que yo estuve acá, no considero irme tirando la toalla. No quiero hablar más porque voy a decir algo de más".