El ex vicepresidente de Boca, Mario Pegolini, volvió a dar la nota en su programa de radio y dijo que “(Marcelo) Gallardo siempre llora o va al escritorio”, en alusión a las lágrimas del entrenador de River por los efectos del gas lacrimógeno.

El ex dirigente habitualmente utiliza su programa por Radio Vórterix para referirse a hechos deportivos u opiniones elevadas de tono. Durante su poco tiempo en la dirigencia de Boca era más fácil conocer su opinión allí que a través de los canales oficiales del club.

Esta vez, las críticas empezaron por los hechos que se desarrollaron anoche en Colombia por los partidos de Copa Libertadores, que estuvieron a punto de suspenderse por los disturbios que hubo en las inmediaciones del estadio.

Pergolini tiene una cuestión personal con la Conmebol. De hecho, durante su vicepresidencia, varias de sus expresiones subidas de tono contra la Confederación le costaron al club una multa de U$S 30.000.

Mario Pergolini, en llamas
Mario Pergolini, en llamas

Ahora, en tono desafiante, les dijo: “¿Cuánto habría que cobrarle a la Conmebol por poner en riesgo a todos? Ya no hablo de lo moral, de que la gente la está pasando mal, de que la región está en un momento crítico... Estos tipos siguen jugando a la pelota pensando que el fútbol trae felicidad al pueblo... No, no le trae felicidad al pueblo”.

Por otra parte, cuestionó a las autoridades de Bararnquilla, a Conmebol y a River por querer subir el volumen en los vestuarios para evadir a los futbolistas del clima espeso que acontecía en las inmediaciones. Nuevamente, con declaraciones ásperas: “La con... de tu hermana, boludo... Están jugando a la pelota. Ponían música para no escuchar los tiros”.

“Ni Hitler se animó a tanto”, sentenció el conductor de Vórterix, con una comparación desmedida y un tanto fuera de contexto.

También le apuntó al entrenador de River. Cuando mostraban un paneo de imágenes y videos con los incidentes en Colombia, registraron el momento en el que Marcelo Gallardo se secaba las lágrimas por el gas lacrimógeno que el viento trasladaba al estadio: “Ver llorar a Gallardo no me dice nada... Gallardo siempre llora. No me dice nada. O llora o va al escritorio”.

Por último, habló de la previa del Superclásico entre Boca y River, con un sutil palo contra Miguel Ángel Russo: “Llegamos los dos equipos paralíticos, recemos que llueva, que pase algo, que alguno se resbale y haga un gol...”.