Un nuevo escándalo sacude al fútbol boliviano y tiene como protagonista nada más y nada menos que al Presidente de aquel país, Evo Morales, que hoy se desempeña como administrador del Club Atlético Palmaflor. 

El club de Morales atraviesa un delicado momento institucional, económico y deportivo. Y si bien muchos esperaban que se hiciera cargo de la situación, el exjefe de Estado apuntó directamente contra los jugadores y los acusó de “ir para atrás” en un partido clave para las finanzas del club. 

“Nos tocó jugar la primera fase (de la Copa Sudamericana) con Blooming, que estaba en el último lugar. Esa semana antes del partido de la Sudamericana, Blooming perdió contra Bolívar en Santa Cruz, Palmaflor ganó a Oriente en Santa Cruz. De acuerdo a nuestra planificación estábamos convencidos que íbamos a ganar, cómo es posible que el ultimo equipo de la liga nos gane 5-0, levanta muchas sospechas, declaró en medios radiales.

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Pero Morales no se detuvo allí y sostuvo: “No todos los futbolistas son buenos, hay algunos que por debajo negocian, porque nosotros planificamos tomando en cuenta que si ganábamos (el partido contra Blooming por la Copa Sudamericana) teníamos U$S 900.000, presupuesto para todo el año. Perdimos el partido y quedamos con dificultades económicas”.

El dirigente también habló de mafia en el arbitraje y hasta puso de ejemplo el partido que su equipo venció a Blooming: “Creo que hay alguna mafia, arbitraje y algunos jugadores. Porque digo del arbitraje, ¿cómo es posible que el tiempo de adición sea de 41 o 42 minutos hasta que Palmaflor pierda”, recordó sobre un partido repleto de sospechas en Marzo pasado. 

Tras semejante denuncia, FABOL (Federación Sindical de Futbolistas Profesional de Bolivia) no hizo oídos sordos y emitió un duro comunicado que fue difundido en conferencia de prensa por su Secretario General 'Chichi' Romero.

"Rechazamos las declaraciones y conjeturas de parte del Sr. Juan Evo Morales Ayma, quien sin presentar pruebas afirmó que existe una mafia entre el arbitraje y algunos jugadores", manifestaron. Y luego, sumaron: “Si tiene pruebas, presente la denuncia respectiva”. Tras lo cual sentenció que si no presenta esas pruebas deberá retractarse públicamente. 

Evo Morales acusó a los futbolistas del club que administra de "negociar por abajo" y el sindicato lo cruzó

Sin embargo, no todo termina allí. El propio Morales afirmó que la FBF no lo habría reconocido como dirigente oficial, por lo que Fabol también observó esto. “No sabemos si (las declaraciones) las realizó como hincha, administrador del club, o político”, chicanearon y pidieron: “Que el club y la administración de Evo Morales le cancele los sueldos a los jugadores. Según trascendió, hay jugadores que no percibieron ganancias en los últimos cuatro a cinco meses”.