El alcalde de Belo Horizonte, Alexandre Kalil, anunció este lunes la prohibición de la presencia de público en los estadios. Se debe a que consideró que en los partidos Atlético Mineiro-River y Cruzeiro-Confiança no se cumplieron los protocolos de seguridad.

"La afición y la población deben saber que abrimos el fútbol de manera unilateral. Después de que decidimos que el fútbol merecía una oportunidad, llamamos al club para poner los protocolos", manifestó. "Hoy la prensa informó que obviamente no había 16 mil personas en el Mineirao", agregó.

"Fue una iniciativa de Alexandre Kalil, quien pidió que nos diera la posibilidad de averiguar si podíamos volver al fútbol. Ningún director de ningún club de Belo Horizonte estuvo allí por carta, en persona o por teléfono preguntando", continuó el alcalde.

Por otro lado, Kalil manifestó que no es una decisión definitiva, sino que volverá a intentar reabrir los estadios al público: "Esta no es una actitud ad eternum, es una actitud que intentamos ante el conjunto de Brasil, con la buena fe de aprovechar la espectacular fase del Atlético y la recuperación del Cruzeiro y América".

En el encuentro entre Mineiro y River, por los cuartos de final de la Copa Libertadores, se registraron escenas de hinchas que no cumplieron los protocolos. Al día siguiente, Kalil manifestó que dicho evento no había pasado la prueba y que era una opción retroceder en la decisión, algo que finalmente cumplió este lunes.