(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Gerardo Rozín comparte algo con el Negro Olmedo, el inolvidable Roberto Fontanarrosa y el Che Guevara. Y es su amor, incondicional, por Rosario Central.

El conductor de "Morfi, todos a la Mesa", habló en la antesala de la final de Copa Argentina, en la que Central intentará por cuarta vez conquistar la Copa Argentina. Las dos últimas, ante River y Boca, fueron signadas por arbitrajes polémicos, pero Rozin, en diálogo con "Doble Amarilla" apuesta a dar vuelta la página: "Fueron arbitrajes muy polémicos, pero no hay que seguir machacando con lo viejo", pide.

DA: ¿Cómo espera el hincha de Central esta final después de las frustraciones recientes en este torneo?
GR: Con optimismo y con cautela, y con muchas ganas. Que es como se esperan esta clase de partidos. 

DA: ¿Cómo vive los días previos? Mucha ansiedad, problemas para dormir.
GR: Nadie que sea hincha de un equipo vive una final con tranquilidad, pero me armo planes que me tengan contento. Por ejemplo viajar con mi hijo a Mendoza, es una actividad que me gusta y ya es una aventura y una linda experiencia en sí misma. 

DA: Viajás a Mendoza, ¿estuviste en las otras tres ocasiones que Central jugó esta final?
GR: En algunas sí y en otras no. Con Boca no fui, y con River sí. No tengo una regla si no la seguiría. Estuve y no estuve, depende el caso. En esta, como este año fui a varios de los partidos que ganamos muy con lo justo, sentí que por eso tenía que ir. 

DA: ¿Qué partido te marcó que Central de nuevo podía llegar lejos?
GR: El clásico. El clásico fue inolvidable para nosotros. Fue a puerta cerradas, pero estuvo bien. Lo vimos con amigos en casa, vino (Reynaldo) Sietecase, estuvo mi hija. Fue divertido. Bueno,  tampoco hay que ser un genio cuando ganas un clásico estas contento.

DA: ¿Qué opinión le genera Edgardo Bauza, que volvió a la institución y jugará una final?
GR: Él es un ídolo nuestro, cada vez que un ídolo agarra la dirección técnica de un equipo, siempre me da que pensar internamente que ojalá le vaya bien. Cada equipo tiene su vinculo con los referentes, y nosotros tenemos uno muy fuerte con Bauza. Aunque esperamos resultados, sabemos que no se va a resentir. Con Bauza nunca pasó ni va a pasar.

DA: ¿Cómo le transmitiste a tus hijos el amor por Central?
GR: Tengo la suerte que nunca fue un debate. Mis hijos nacieron de Central y acá no son mayoría. Vivo eso con mucha alegría. Inclusive estamos armando algo para el 19 de diciembre, el “Día de la Palomita” para que los chicos de Central se conozcan y , quién te dice, el día de mañana puedan ir juntos a la cancha.

DA: ¿El hecho de llegar a esta final con el antecedente de los arbitrajes polémicos con Boca y River, pesa?
GR: Los dos arbitrajes ante Boca y River fueron muy polémicos, es cierto. Pero vamos con optimismo. Esperemos que esta vez salga todo bien, no hay que seguir machacando con lo viejo.