[De la redacción de DOBLE AMARILLA] Luego de una primera temporada con licencias otorgadas en proceso de competencia, la Superliga inició esta semana el proceso que terminará con el otorgamiento de la habilitación para competir en la temporada 2018/19 de la máxima categoría del fútbol argentino.

En un proceso que despertó críticas hasta en FIFA por la duplicidad de tareas con la AFA, que otorga licencias para las competencias de Conmebol, la Superliga puso como tiempo máximo para la presentación de la documentación necesaria hasta el próximo 15 de abril.

Con un modelo del reglamento implementado por UEFA hace más de dos décadas, por FIFA hace quince años y desde 2018 por la Confederación Sudamericana de Fútbol, la Superliga inició su primer proceso completo que incluirá a los 24 equipos que se queden en la categoría y, con un esquema más flexible, para los dos ascendidos desde el Nacional B.

Luego de recibir toda la documentación, la Gerencia de Licencias se tomará hasta el 15 de mayo para evaluar la información presentada por los clubes y hay dos opciones: que no haya observaciones o que se registre información incompleta o faltante, que derivará en un plazo de cinco días para que las instituciones puedan subsanar esta falta o error.

A partir de ese momento, la fecha clave es el 31 de mayo cuando el Comité de Licencias realizará una resolución sobre cada club con tres opciones: a) licencia otorgada sin observaciones, b) licencia otorgada con observaciones (otorga pero fija una multa y da un tiempo para cubrir incumplimientos) o c) licencia no otorgada.


Desde esa instancia habrá 15 días para que los clubes puedan presentar las apelaciones a las resoluciones del Comité de Licencias, que el 30 de junio resolverá sobre cada caso.

Los dos clubes que se sumen a la Superliga con su ascenso desde el Nacional B tendrán tiempos más laxos para cumplir con los requisitos exigidos por el Comité de Licencias pero al momento de iniciar la competencia deberá tener todo en regla.

Esta licencia no es un “certificado muerto” sino que es una habilitación para comenzar a competir, que luego tendrá un seguimiento y podría derivar en sanciones por faltas o incumplimientos.