(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El arbitraje argentino no pasa un gran momento, sino más bien lo contrario. Aunque los reclamos por errores son parte del día a día, en el último tiempo, los referís han sido más discutidos que nunca y puestos reiteradamente bajo la lupa, del hincha, del jugador y, ahora con frecuencia, del dirigente. Según expresó Guillermo Marconi, Secretario General del SADRA en diálogo con 'Diario Perfil', esos factores mezclados hacen que los árbitros dirijan ''muy presionados y asustados''.

''Que protesten los hinchas es algo lógico y hasta comprensible, pero a los dirigentes que salen a criticar públicamente cuando se sienten perjudicados ante el error de un pito les preguntaría por qué no salen a felicitarlos cuando son favorecidos. ¿Sabés por qué no lo hacen? Porque lo único que buscan es sacar ventaja de su investidura para llevar agua a su propio molino. Son peores que los hinchas”, disparó el ex árbitro, apuntando directamente a los mandatarios de los clubes.

“Con los periodistas pasa algo parecido: hay quienes parecen disfrutar ante los errores ajenos y hablan como si jamás se hubieran equivocado en su trabajo. Hay jugadas que las pasan por televisión 20 veces y aún así no se ponen de acuerdo, cuando el árbitro tiene que tomar una decisión sobre la marcha. El VAR tampoco es la solución, porque no se pueden parar los partidos ante cualquier duda. Si lo aplican, el fútbol va a perder mucho de su esencia. Yo lo usaría únicamente para confirmar si la pelota traspasa la línea de gol”, remató en diálogo con 'Perfil'.

''Según la FIFA, Pitana es el mejor árbitro argentino y uno de los mejores del mundo. Por eso, a pesar de los errores que pudo haber llegado a cometer en el partido entre Estudiantes y Chacarita, y a que un colega del otro gremio se haya cansado de hacer lobby en su contra, va a estar en Rusia. La realidad es que, de un lado o del otro, a los árbitros siempre nos van a cuestionar, tanto hinchas, como dirigentes y periodistas, y muy rara vez nos van a felicitar'', concluyó el secretario, atacando también a Patricio Loustau, quien criticó duramente a Néstor Pitana en reiteradas ocasiones.