(De la redacción de DOBLE AMARILLA) Luego de un debate durante meses todo parece indicar que la Copa de la Superliga desde abril a principios de junio del año próximo será una realidad. Y esta proximidad genera una grieta entre grandes y chicos dentro de la Superliga porque mientras los primeros no están convencidos del número, que hoy es 150 millones a repartir por el certamen, los segundos entienden que es la realidad que toca para esta primera edición y que habrá tiempo para mejorarla.


“Estamos cerca y la dentro de quince días nos reuniremos para aprobar este proyecto entre todos. Si bien no es el número ideal en premios a repartir es una base para seguir trabajando en las futuras ediciones e ir aumentando el número”, enfatizó Pascual Caiella tras la reunión de Comité de este martes.

Al ser consultado varios dirigentes sobre esta grieta que genera la decisión final sobre un torneo que se disputará luego de la actual edición de Superliga, la respuesta de los equipos medianos y chicos fue sencilla: “Se pondrá en consideración y luego a votación en democracia y ahí cada club es un voto”.


Los cinco grandes argumentan que con esos premios la proyección que recibe cada equipo por partido es inferior a lo que pueden lograr al organizar una gira por el exterior por la diferencia cambiaria. Sin embargo, los calendarios con plena competencia a lo largo del mundo hacen difíciles combinar una serie de partidos en mercados apetecibles.

Los seis mejores de la clasificación final de la Superliga saltearán la primera fase y los restantes veinte –incluído los dos descendidos- disputarán dicha etapa inicial a simple partido en busca de conformar los octavos de final de un torneo que desde ese momento se realizará a encuentros de ida y vuelta.

El vencedor de este nuevo certamen se clasificaría a la Libertadores 2020 y el subcampeón a la Sudamericana del mismo año, mientras que el primer campeón de esta Copa de la Superliga disputaría la Recopa ante el ganador de la temporada de Superliga.

Por otra parte, Mariano Elizondo detalló las conclusiones de la primera charla que llevó a cabo con otras autoridades de los clubes, para armar el plan denominado "Agenda 2030", que trata de todos los aspectos inherentes a las problemáticas de las instituciones: desarrollo de juveniles, temas impositivos, formas de financiamiento y administración, organización de los torneos, etcétera.