La leyenda de Nadur y su dureza a la hora de negociar, avanza. Esta semana sumará otro capítulo. El dirigente, reconocido por sus arduas negociaciones y su fama de tacaño, sacó de la galera una jugada como mínimo, llamativa. 

El presidente de Huracán espero a que el juvenil Messidoro firme en Cruzeiro (el pibe forma parte de la negociación entre Boca y el equipo mineiro), y le pidió a Angelici algo que en La Boca ni se imaginaban. Primero, Huracán quiere que Boca le pague todo el dinero que Cruzeiro no le pagó por el primer 50% del pase de Ramón Ábila. Ese dinero (1,6 millones de dólares), Boca está dispuesto a pagarlo. Pero, el segundo pedido de Nadur no estaba contemplado. Quiere que Boca le pague 4 millones más, en diciembre, en concepto del segundo 50%, del que Cruzeiro tenía opción de compra. Así, Angelici se echó atrás, dijo que el pase no se hace y todo se complicó, porque el chico Messidoro ya está en Belo Horizonte, Ábila no sabe donde ir, Boca tiene que solucionar dos temás (este y el de Centurión) y en Huracán ven como todo el escenario, los favorece. Perdidos por perdidos, si se cae la operación, ellos no pierden nada.