El primer objetivo se cumplió. Con el título bajo el brazo, Boca puede estar tranquilo y rearmar su plantel de cara al futuro. De lo primero que hablarán Daniel Angelici y Guillermo Barros Schelotto es de mantener el plantel. Hay jugadores claves que quieren retener para no desarmar la base. El primer nombre que será tratador es el de Darío Benedetto. El goleador del campeonato llegó en silencio y se convirtió en una pieza clave. Si bien tiene contrato, hay una oferta firme del fútbol de EE.UU para llevárselo. También hubo sondeos de la Roma. Por eso, en los últimos días, el presidente salió a decir que costaba 21 millones de dólares.

El otro jugar imprescindible para el Mellizo es Ricardo Centurión. El préstamo del San Pablo se vence y Boca podría pedir extenderlo. También está la posibilidad de comprar el pase, aunque eso está por verse. La decisión saldrá de la reunión de esta tarde. El otro préstamo que al entrenador le interesa renovar es el de Jonathan Silva, clave en la última parte del campeonato.

En cuanto a los refuerzos, hay dos nombres que desvelan a Guillermo: Guido Pizarro y Paolo Goltz. A ambos los tuvo en Lanús y sabe que le pueden dar un salto de jerarquía al plantel. El defensor, que también es pretendido por Independiente, llegaría para ser la pieza clave en una defensa que no da mucha seguridad. El volante, es la debilidad del Mellizo. Le encanta su forma de jugar y su polifuncionalidad.