Se podría decir, hilando fino, que River no logró detener la partida de Lucas Alario por un "tecnicismo legal". La realidad es que lo que dice el artículo 16 del "Reglamento sobre el estatuto y la transferencia de los jugadores" es, en muchos casos, un acuerdo tácito, un "pacto de caballeros".

No está específicado en casi ningún contrato, y de eso se valió el Bayer Leverkusen para llevarse a Alario aún con la temporada iniciada, yendo claramente en contra de ese artículo, uno de los más breves de todo el reglamento que dice, sin dejar ni un ápice de duda ni lugar para segundas interpretaciones que "un contrato no puede rescindirse unilateralmente en el transcurso de una temporada".

Bueno, no le volverá a pasar. El colega Federico del Río, reveló que en las últimas dos renovaciones que realizó la dirigencia que encabeza Rodolfo D'onofrio, las de Ignacio Fernández y Gonzalo Montiel, ya figura dicha cláusula en el contrato y otra más que, por lo menos, le significará más plata al club. 

El ex Gimnasia y el nacido en las inferiores Millonarias, renovaron hasta 2021 sus contratos con la entidad. Los mismos incluían dos nuevas cláusulas mediantes las cuales River demostró que aprendió de lo que le pasó en el Alario-Gate, y que no lo volverán a agarrar desprevenido.

¿Cuáles son? En caso de que alguno de los futbolístas quiera ser adquirido a 10 días del cierre del Libro de Pases, su cláusula de rescisión, automáticamente, subirá un 33,33%. Por otro lado, ahora sí quedó escrito y rubricado que está prohibido dejar el club una vez que la temporada haya iniciado. El que se quema con leche...