La venganza de Alejandro Domínguez a las críticas del presidente de AFA, Claudio Tapia, y el capitán de la Selección Argentina, Lionel Messi, llegó esta tarde al Comité Ejecutivo de Superliga donde todos los presidentes mostraron su “preocupación” por la decisión tomada por Conmebol contra el fútbol argentino.

Ayer el Comité de Conmebol decidió despojar a Tapia de su cargo de representante del ente sudamericano ante FIFA y desde la misma entidad se dejó trascender que también se buscaría sacarlo de la vicepresidencia de la entidad. En una movida orquestada en la última semana, Domínguez comprometió el apoyo de todos los presidentes sudamericano para lograr este castigo a la Argentina por haber osado criticar las diversas irregularidades que se dieron en la organización de la Copa América.

Esta tarde, luego de que se aprobara el cambio en los descensos, el nuevo reglamento de licencias y el reglamento deportivo, el tema se instaló en el Comité. El vicepresidente de Banfield, Oscar Tucker, pidió la palabra y expresó su preocupación por la decisión de Conmebol. Palabras más, palabras menos, Tucker dijo que Tapia defendió a la Selección, a su capitán y a todos los jugadores, algunos de ellos hoy representan a los equipos de Superliga. Luego Cristian Malaspina (Argentinos Juniors), Nicolás Russo (Lanús), Pascual Caiella (Estudiantes), Gabriel Pellegrino (GELP) y Ricardo Carloni (Rosario Central), entre otros, adhirieron a las palabras y propusieron que sea toda la Superliga la que manifieste su “preocupación y su solidaridad” con el Presidente. Todos los presentes se sumaron a esa iniciativa y acordaron dar a conocer en las próximas horas una carta abierta en la que apoyan al presidente de AFA y demuestran la unidad del fútbol argentino ante la sanción.

Como ya contó Doble Amarilla, Domínguez no sólo buscó que Tapia quede aislado en Conmebol, también intentó hacer ruido en Argentina. Al menos cinco clubes grandes de la Superliga admitieron a este medio haber recibido llamados del presidente de Conmebol tras la famosa carta de AFA. Algunos de ellos calificaron abiertamente ese llamado como “un intento de meter ruido en Viamonte”.

Conociendo esta situación es que los presidentes de Superliga decidieron dar su apoyo. Entienden que cualquier intento de intromisión directa  “non santa” de Conmebol en el fútbol argentino será intolerable. Para eso se basan en antecedentes en los que Conmebol jugó al límite y se inmiscuyó por demás en la política de sus asociaciones miembro. En los pasillos de Superliga, algunos presidentes recordaron los casos de Uruguay, Perú y Ecuador como casos más emblemáticos.

Lo cierto es que, según lo acordado, en las próximas horas los clubes emitirán el comunicado y habrá que ver qué lectura hacen en Paraguay. Otro dato es que relación entre Domínguez y Superliga jamás fue buena. El último roce fue cuando Alejandro Domínguez decidió romper un acuerdo global y programar inconsultamente los partidos de la final de Copa Libertadores entre River y Boca durante un fin de semana. En ese momento el paraguayo programó y reprogramó fechas desarmando por completo el calendario de Superliga sin siquiera avisar en Puerto Madero causando enojo en la mesa directiva y en todos los dirigentes que no estaban jugando la final de la Copa.