El viaje a Dubai los alejó de las derrotas de sus equipos a los presidente Nicolás Russo, Daniel Angelici y Víctor Blanco. Aún así, a pesar de su lejanía con el fútbol argentino, sus nombres y sus rostros estuvieron en el centro de la escena. Haber estado presentes en FIFA (con todo lo que eso implica) y “no dar la cara” en la fecha más importante del fútbol argentino, tiene su resultado adverso más allá de como termine el partido de la línea de cal para adentro.

Sin temor a ser vistos jugando un picado sobre la gramilla asiática, los directivos se fotografiaron sin reparos. A miles de kilómetros, a lo largo del fin de semana, Lanús caía en terreno enemigo y se alejaba definitivamente de la chance de jugar la próxima Libertadores, sin Russo para caminar los pasillos del estadio y mantener los diálogos tan característicos de Nicola con los referees.

Ya habiendo estado en el ojo de la tormenta la semana anterior, tal como lo adelantó Doble Amarilla, ahora el presidente vuelve al Sur del GBA con la certeza de que un traspié en la Copa Libertadores dejaría en evidencia la caída que viene ensayando no sólo el equipo, sino también el club, debido a sus constantes actividades en la política provincial y local, más sus funciones en AFA.

Angelici es el otro caso. Con un Boca que no da pie con bola en las últimas semanas, y ya a esta altura del certamen han sido varias veces en las que figurativamente “presentó la renuncia” a pelear el campeonato, y San Lorenzo y Newell´s no terminan de aceptársela. Esto favoreció a River y Banfield, de escalada en los últimos partidos, y la pelea del campeonato se encendió. Poco parece preocuparle eso a Angelici, quien lució sonriente al lado de Maradona, rival de Riquelme, figura central de toda actividad boquense (antes como deportista, ahora como casi seguro presidente). Boca puso mucho en juego, y su presidente, estaba atendiendo otras cuestiones. ¿Habrá pase de factura?

El cierre del domingo fue con la caída del Racing de Blanco. Tras años de bonanza en los derbys de Avellaneda, le llegó la hora de morder el polvo de la derrota. Blanco sabe que cuenta con espalda suficiente como para darse el gusto de hacer un viajecito para atender cuestiones de FIFA con la delegación de AFA, pero en los pasillos del Cilindro se supo que rivales electorales e incluso actuales compañeros de lista del magnate hotelero, aprovecharon esta semana de ausencia del mandamás para tejer alianzas, elucubrar pasos a seguir y diagramar estrategias electorales de cara a los comicios de diciembre de este año. Habiendo perdido terreno considerablemente en la lucha por el título, el elenco de Cocca debe revalidar semana a semana su condición de clasificado para la Sudamericana, lo que le iría quitando de a poco un poco de fortaleza al presidente, y de seguir así, en pocas semanas no tendrá tanto margen para atender a la AFA y desatender al mundo académico.

Para colmo, entre varios dirigentes circulaba un whatsapp de uno de los presidentes que compartieron almuerzo con Maradona. El hombre en cuestión puso en un chat su foto junto al Diez con la leyenda: "con este amuleto no podemos perder".  Con el Diego no, muchachos....