(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Roberto Tobar ganó su Superclásico. La Superfinal de América episodio I contó con un arbitraje que no fue protagonista, más allá de algunas quejas (menores) de ambos equipos. El chileno comandó el clásico con rienda corta, no se dejó amedrentar por una Bombonera llena y utilizó la tarjeta amarilla cuando los jugadores quisieron ponerle a la gente en contra, recurrió a la amarilla.

La Superfinal no tuvo grandes polémicas, pero el árbitro tampoco se compró problemas. ¿Tuvo manchas? Sí, dos notorias. Debió haber expulsado a Borré, que luego de su amarilla le revoleó el puño y lo insultó y debió haber amonestado a Nahitán Nández, que le pegó de atrás al pibe Palacios. Esa amarilla lo dejaba afuera de la revancha. También podría haber expulsado a Ábila, por la segunda amarilla al tirarse en la puerta del área de River. 

Hubo algunas otras jugadas más, la primera llegó a los pocos segundos del partido. Tras un córner, Palacios despejó y la pelota le pegó en la cara. La hinchada y varios jugadores de Boca reclamaron mano. Tobar no se dejó llevar y no cobró nada. El VAR tampoco le dijo nada al respecto.

Luego, también debió desactivar una pelea que se dio con Milton Casco como principal protagonista del lado de River, y Nahitán Nández, Leonardo Jara y Wilmar Barrios del lado de Boca. Tras una "retención" del lateral, los de Boca se le fueron al humo. Tobar separó y recurrió a la palabra antes que a la tarjeta. Podría haber amonestado, al menos, a Casco y Barrios.

Luego del empate de River, el Millo tuvo una muy clara. Pase filoso de Palacios y Borré, habilitado, pica al vacío. La Bombonera en llamas pedía Offside, mientras el delantero colombiano de River la desperdiciaba. No era. Bien el árbitro y el línea acá también.

En la segunda mitad, Tobar no se dejó llevar por un penal inventado de Ábila, que le hizo la seña del VAR, creyendo que Pinola lo había tocado. También en la segunda mitad, debió haber amonestado a Nández que pegó una patada de amarilla sobre Palacios, otra jugada en la que dio "ley de ventaja" y luego no volvió atrás para amonestar. 

De los diez jugadores que podían perderse la revancha, sólo Rafael Santos Borré recibió la segunda amarilla. En el "Millo" zafaron Jonatán Maidana, Javier Pinola, Enzo Pérez, Pity Martínez y Lucas Pratto. Del lado Xeneize, no recibieron amarilla ni Cristián Pavón, ni Nahitán Nández, ni Lucas Olaza, ni Pablo Pérez. 

Tobar sí amonestó a Leo Jara, Sebastián Villa y Wanchope Ábila y Carlos Tévez del lado de Boca y a Milton Casco y el mencionado Borré, en River. 

En resumen, un partido que pasó sin grandes estridencias, que Tobar manejó más con la palabra que con la tarjeta y en el que se sacó aprobado. Él ganó su Superfinal.