Se suponía que este lunes al mediodía se iba a dar el encuentro entre Claudio Tapia, Edgardo Bauza y Marcelo Tinelli para definir el futuro del entrenador de la Selección Argentina. Las voces off the record anuncian que el Patón tiene las horas contadas y que los dirigentes quieren despedirlo de la forma más elegante posible. Sin embargo, con el correr de las horas, la delicadeza se va transformando en rusticidad porque la salida de Bauza está instalada como un hecho seguro al que solo le falta el anuncio, mientras el entrenador sigue mostrándose fuerte públicamente como intentando dar un manotazo para agarrar una soga que no le van a tirar.

Esta mañana, Tapia brindó su primera entrevista como presidente de AFA al programa Más despiertos, del canal televisivo de La Nación, y sus palabras con respecto a la situación de la Selección Argentina fueron determinantes a pesar de la intención de mantenerse en el medio de confirmar la continuidad de Bauza o su despido. Cuando le consultaron concretamente por el entrenador, comentó: "Bauza tiene contrato y tenemos que hablar. Si hay un técnico trabajando no hay que llamar a nadie (por Sampaoli)". Si en lugar de vaticinar que habrá una charla, Tapia hubiese dicho "lo vamos a respetar", eso habría sido un indicio de que Bauza continuará en su cargo porque su vínculo se extiende hasta el final de las Eliminatorias con renovación automática en caso de clasificación al Mundial.

No obstante, Tapia llegó a la cima de la AFA, entre otras cosas, porque tiene cintura política. Dicha habilidad dialéctica igualmente expuso cuál es su idea: echar a Bauza. "Que la Argentina juega mal lo ven todos. Con Chile había que ganar para sacarse el karma", declaró Tapia, y luego agregó: "Para jugar bien los jugadores tienen que estar convencidos. Tenemos la materia prima que es la necesidad de cualquier otra selección".

La reunión entre Tapia, Bauza y Tinelli se pospuso para el miércoles o jueves. Los compromisos de Tapia son el argumento de la postergación y a su vez la estrategia del presidente de la AFA, que con el mal manejo de esta situación quiere empujar a Bauza a que renuncie porque ese escenario es más conveniente para las arcas de la AFA. Si el Patón, que juntó a todo su cuerpo técnico en el predio de Ezeiza, no da el brazo a torcer, cuando se cierre la puerta de esa habitación junto a Tapia y Tinelli, escuchará las razones por las que dejará de ser el entrenador de la Selección Argentina y allí empezará el plan para intentar asegurar la llegada de Jorge Sampaoli lo antes posible.