Redmayne comenzó el partido definitorio ante Perú en Doha como suplente, pero el entrenador Graham Arnold dispuso su ingreso un minuto antes del final del tiempo suplementario, con el claro objetivo de ganar en los penales, que le valió al elenco oceánico su pasaporte al Mundial.

Algo parecido a lo que el entrenador neerlandés Louis van Gaal realizó con Tim Krul, el sustituto de Jasper Cillessen, en el Mundial de Brasil 2014 frente a Costa Rica para el pase a las semifinales.

Redmayne, de 33 años, reemplazó al solvente Mathew Ryan y usó un método muy llamativo en cada definición: saltar y moverse sobre la línea del arco, en una suerte de paso de baile, para desconcentrar a los pateadores peruanos.

El remate al palo de Luis Advíncula, el defensor de Boca Juniors, puso en partido a Australia y Redmayne atajó el último, ante Alex Valera, para la consagración australiana. La hazaña de Redmayne no es novedosa. Ya la empleó en 2019 cuando sacó campeón a Sidney FC de Australia al atajar dos penales, con bailes incluidos.