Alejandro Garnacho, al igual que Nicolás Paz, Valentín y Franco Carboni y hasta Luka Romero, eran desconocidos para el público futbolero en general hasta que los convocó Lionel Scaloni para esta doble fecha de Eliminatorias. El juvenil del Manchester United es el que más chances tiene de ir al banco de suplentes ante Venezuela esta noche y sumar minutos en La Bombonera y más allá de su elección, esto no le prohibiría, desde lo burocrático, jugar para España, país al que representó en divisiones juveniles.

La FIFA aprobó que se permita el cambio a quienes hayan jugado hasta tres veces para una selección antes de cumplir 21 años, incluidos partidos de clasificación.

Si el futbolista ya ha jugado un partido internacional oficial de categoría “A” con su Federación actual (teniendo ya la nacionalidad de la nueva Federación que quiere representar), siendo menor de 21 años en el momento del partido oficial, sin haber jugado más de 3 partidos internacionales de categoría A y que ya hayan pasado 3 años desde el último partido oficial. No podrá, en cambio, en el caso en que hubiera disputado ya con la actual Federación la fase final de la Copa del Mundo o de un torneo de Confederaciones como la Eurocopa.

Garnacho cumpliría con todos esos casos si jugara ante Venezuela pero luego querría representar al país donde nació: él es español, tiene 17 años, solo disputaría un encuentro -o dos si también participa ante Ecuador- y no se trata de un encuentro de la fase final de una Copa del Mundo, sino de una etapa clasificatoria y además, esperar tres años para ser nuevamente convocado. Es decir, durante tres años rechazar todas las convocatorias, en este caso de Argentina y esperar ese tiempo para que otro país lo convoque, algo que parece poco probable que suceda por la decisión del chico del Manchester United de jugar con la Albiceleste.

El caso del 'Chimy' Ávila

El actual delantero del Osasuna español reconoció en las últimas horas que ante la falta de oportunidades en Argentina, aceptaría un llamado de España.