(De la redacción de DOBLE AMARILLA) No fue un lunes más en Valdebebas. En la Casa del Real Madrid hubo un reencuentro que nada tiene que ver con el club que ahora volvió a dirigir Zinedine Zidane. Es que luego de 260 días desde aquella decepcionante tarde-noche en el Kazán Arena, Messi se volvió a poner la camiseta de la Selección Argentina e inició un nuevo proceso con Lionel Scaloni como entrenador.

El 10, que además recuperará la cinta de capitán en el partido ante Venezuela, tuvo una jornada de emociones con su llegada al hotel bien temprano, su primer entrenamiento con aires renovados entre sus compañeros para una presentación del viernes en el Wanda Metropolitano que tendrá mucho de sentimental y otro tanto de estrategia futbolística a ver cómo se suma Messi a la nueva estructura made in Scaloni.

Tan sólo Franco Armani es mayor que los 31 actuales del 10, ya que el arquero de River tiene 32. Y de sus ex compañeros mundialistas de Rusia quedan siete: Armani, Mercado, Tagliafico, Acuña, Lo Celso, Di María y Dybala. Además ayer compartió una práctica por primera vez con once que buscaron su primera foto con el astro: Musso, Andrada, Foyth, Kannemann, Montiel, Saravia. Lisandro y Gonzalo Martínez, Zaracho, Domingo Blanco y Matías Suárez.

La primera práctica, en territorio bien visitante como Valdebebas, fue distendida donde el crack del Barcelona se mostró cómodo... un dato no menor de acuerdo a sus situaciones siempre particulares cuando viste la celeste y blanca. Transcurrirá una semana en silencio de Messi trabajando con la Selección a la espera del partido del viernes en el Wanda Metropolitano, ese mismo escenario que hace un año dejaba el 6-1 en contra ante España con Leo en el palco y sin acción.

La convivencia de la tarde-noche en el Hotel Eurostars de la capital española fue ameno con muchos de los nuevos compañeros que se animaron a pedirle la foto a Messi y por la noche llegó un breve cara a cara a solas con Scaloni, ese técnico que no lo apuró y respetó los tiempos de su ahora nuevo capitán.

En ese cónclave breve el Lio DT le pidió al Leo jugador que disfrute de esta nueva era y que sea feliz y hubo una plena confianza en poder llegar de la mejor manera a la Copa América de Brasil, donde Argentina irá por lograr un título continental que se le niega desde 1993 y que en las últimas dos ediciones lo tuvo como subcampeón de Chile.