(De la redacción de DOBLE AMARILLA) La Selección Argentina vivió en este 2018 un año tormentoso, quizás de los más complicados de la última era. Jorge Sampaoli llegó para ilusionar a todos los hinchas, era indiscutido al momento de su arribo y todos se esperanzaban con un trabajo a largo plazo, puede enderezar la tan difícil clasificación a Rusia.

Fue duro, Argentina sufrió ante Ecuador pero terminó sacando boleto para el mundial sobre el final de las eliminatorias sudamericanas y evitando el repechaje. El debut en Rusia frente a Islandia para muchos parecía una cosa fácil, pero la selección europea terminó empatando el partido. De allí en más, fue todo cuesta arriba para la selección, que tuvo cambios de esquema y muchas cosas que nunca han sido demasiado claras.

Frente a Croacia, Sampaoli eligió un cambio de esquema (más acorde a su idea) y la Albiceleste sufrió una derrota histórica: 3-0 frente a los balcánicos y un Messi que además, no se recupero desde los futbolístico tras el penal errado ante Islandia.

Ese día en la concentración argentina en Bronnitsy fue un caos: rumores de renuncia de DT, sublevación de referentes y mucha incertidumbre. Por primera vez en en todo el mundial de Rusia quedaba evidenciado que los protagonistas ya no creían en la idea del DT. 

Como a lo largo del Mundial, "Doble Amarilla" estuvo en Rusia y contó los hechos sin tergiversaciones para permitir diferenciar la información de fuentes interesadas que buscaban instalar situaciones.

Frente a Nigeria y con un gol agónico de Rojo, con mas garra que fútbol y orden, Argentina ganó y gracias a una serie de resultados, clasificó segundo en su grupo pero el árbol no tapaba el bosque.

Francia en octavos de final fue lapidario: 4 a 2 y a casa, crónica de una muerte anunciada pero el terremoto recién empezaba ya que su epicentro estuvo mucho después, a la vuelta y con los galos coronándose en Moscú tras la final frente a Croacia.

Mientras la opinión pública volvió a exigir la renovación de muchos jugadores, Tapia fiel a su costumbre puso la pelota en el freezer. La salida de Sampaoli fue desprolija, como todo su proceso al mando de la selección, pero se terminó dando un fin de semana por la noche.

Desde allí, y con el torneo de L'Alcudia por delante, Lionel Scaloni junto con Pablo Aimar se hicieron cargo de la Selección al principio como interino y después, ya de manera oficial, al menos hasta la Copa América 2019.

Luego de la coronación del equipo juvenil en L'Alcudia, se produjo la renovación con Icardi, Lo Celso, Dybala, Armani, Tagliafico, Simeone, Lamela, Kannemann y muchos otros nombres que no figuraban en el radar de la selección hasta antes del Mundial.

Entre tanto, Messi decidió alejarse de Argentina por un tiempo, sin confirmar cuando volvía, algo que en AFA preocupaba a todos, como también lo hacía con los sponsors. Todo indica que Lionel volverá en Marzo, ya con un DT fijo y aún con algunas cosas que no comparte, pero siente que debe volver…nosotros lo esperamos con los brazos abiertos.

En el medio, Scaloni tuvo que dejar la Sub 20 que quedó un poco abandonada con un sudamericano en menos de un mes por delante y por eso, se concretó hace días la llegada de Fernando Batista, quien tiene el gran desafío de armar un equipo en tiempo récord.

Pensando en la mayor, Scaloni sabe que se juega todo en Brasil 2019, esa ansiada Copa América desde hace años. Arranca con crédito por ser el “DT de la renovación” pero los resultados en el fútbol argentino siempre terminan mandando, maldita pero ya afianzada costumbre de nuestro amado deporte.