(De la redacción de DOBLE AMARILLA) La Policía de la Ciudad de Buenos Aires realizó un importante procedimiento en las inmediaciones y dentro del estadio del club Huracán donde entrena la Selección Argentina. Se reforzó el vestuario y la cantidad de personal para custodiar a los dirigidos por Jorge Sampaoli.

Esto se debe a que desde la seguridad del seleccionado se manejó la posibilidad de la visita de la barra brava del club local para saludar a los futbolistas argentinos sospechando cierta complicidad del personal de Huracán para facilitarles el ingreso. La Selección se entrena ante una multitud de chicos.

Según pudo averiguar DOBLE AMARILLA, ante esta situación desde el seno del plantel albiceleste no quisieron tener ningún tipo de contacto con la barra brava quemera.

El manejo de la seguridad es manejado exclusivamente por la Policía Metropolitana, dado que la APREVIDE se desligó del operativo porque Juan Manuel Lugones quería que el entrenamiento se lleve a cabo en la Provincia de Buenos Aires, más precisamente en Avellaneda en el estadio de Racing. De todas formas, el traslado de la Selección del predio al estadio y del estadio al predio sigue estando en manos de APREVIDE.

E tanto, en cuanto a la organización del entrenamiento, en un principio se manejó la posibilidad de realizar dos prácticas a puertas abiertas como la de esta mañana, pero por, justamente asuntos de seguridad y protocolos se decidió hacer solo uno.