(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, expresó “la profunda comprensión” sobre la situación del delantero peruano Paolo Guerrero aunque ratificó que no podrá dar una solución para que pueda disputar con su equipo nacional el Mundial de Rusia.

La sanción fue impuesta por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), tras una apelación presentada contra la decisión de un órgano judicial de la FIFA por parte del jugador y no hay más nada que se pueda hacer fue la conclusión luego del cónclave que el jugador, el presidente de la FIFA y su par de Perú, Edwin Oviedo, tuvieron en la sede de la FIFA en Zúrich.

Guerrero, capitán de la selección de Perú, había sido sancionado por el TAS a 14 meses de inhabilitación por dar positivo en una prueba de doping a la que fue sometido después de un partido contra Argentina perteneciente a las eliminatorias disputado el pasado 5 de octubre en La Bombonera.

Para esta gestión, Guerrero recibió incluso el respaldo del Sindicato Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro), que se sumó a la petición a la FIFA para que le permita jugar el Mundial con la firma de los tres capitanes de los equipos que integran la zona C de Perú en el Mundial: Francia, Dinamarca y Australia.

El principal argumento de Guerrero para pedir levantar la sanción es que el doping fue totalmente accidental y ocurrió al ingerir un té que contenía restos de un mate de coca, lo que hizo que se detectara en su organismo la benzoilecgonina, principal metabolito de esta hoja.

Durante la reunión con Infantino, Guerrero y Oviedo "manifestaron su posición sobre esa sanción", mientras que el presidente de la FIFA les recordó que la misma fue el resultado de una apelación contra la decisión de un órgano judicial "independiente" de la FIFA.

En este sentido, fue el propio Guerrero quien abrió este proceso al presentar la primera apelación contra la sentencia de seis meses dictada por el órgano de apelaciones de la FIFA, que el peruano desea ver anulada o reducida por considerarla injusta.

Sin embargo, la Agencia Mundial Antidopaje(AMA) presentó una apelación y pidió al TAS un aumento del tiempo de inhabilitación, lo que finalmente consiguió y hoy terminó confirmando que Paolo Guerrero no jugará el Mundial de Rusia.