(Desde Bronnitsy, Rusia) El equipo argentino llegó a San Petersburgo 'complicado y aturdido' que le generaba jugar atado y angustiado por una posible eliminación en primer ronda, pero la comunión con los hinchas, el angustiante triunfo ante los africanos y la liberación generó que ahora pueda andar en Rusia 'sin cadenas sobre los pies'.

Al ritmo de Los Pericos, el equipo argentino es consciente que "nada escapa, nada muere, nadie olvida" lo que fue el camino hasta el Mundial e incluso las dos primeras presentaciones aquí en Rusia porque puede cantar en primera persona: "navegante sin rumbo fui y naufragué", antes de llegar a este punto de inflexión.

"Y he perdido, he ganado, Y he sabido defenderme bien", fue la frase que sitnetiza este recorrido errante con muchas vicisitudes y obstáculos que dificultaron la tarea mundialista. Sin embargo, desde ahora las estrofas de esta canción de Los Pericos que la selección quiere entonar son: "Contengo la respiración, es un día tan claro; en busca de historias felices, felices serán el día en que pise firme"

El partido ante Francia será una oportunidad en el Kazán Arena para entrar a jugar sin cadenas sobre los pies y poder encontrar ese funcionamiento que, con el impulso anímico impulsen a este equipo a demostrar su mejor versión y a sacar pasaporte a cuartos de final.