(Desde Bronnitsy, Rusia) Con la idea de despejar la cabeza y poder vivir una tarde más distendida, la selección tuvo una agenda para recargar las pilas: luego del entrenamiento liviano de esta mañana fue turno de un asado para hablar de forma distendida sobre lo que pasó y lo que viene, luego abrir las puertas para recibir a familiares y amigos en una jornada tan especial como el Día del Padre.

Los sentimientos encontrados luego del empate frente a Islandia necesitaban un recreo mental y este asado junto con la visita de familiares y amigos fue la receta perfecta para recargar las pilas y empezar a tomar impulso para el encuentro del próximo jueves ante Croacia.

Con carne especialmente traída desde Argentina, la actividad se planeó durante toda la semana y pretendía ser un mimo para un equipo que esperaba festejar el triunfo frente a Islandia. Sin embargo, la tradicional comida nacional en Bronnitsy se transformó en un bálsamo para buscar la serenidad necesaria para lo que viene

Desde las 15:30 (hora local) comenzaron a llegar desde Moscú los allegados tanto de los jugadores como del cuerpo técnico para ver a sus seres queridos. "Fue un muy lindo momento de cada uno", relataron desde el interior del Bronnitsy Trainning Centre.

Para este lunes está programado una práctica importante para ir definiendo el once titular para el partido ante Croacia y será importante haber capitalizado este domingo revitalizador con hincapié en el aspecto humano.