El presidente saliente de River, Rodolfo D'Onofrio, fue oficializado hoy como uno de los vicepresidentes de la AFA en la Asamblea General Ordinaria que se realizó en el predio de Ezeiza. Sin embargo, el dirigente sorprendió a sus pares y no estuvo presente.

Esta tarde, asumió el nuevo Comité Ejecutivo que tiene a Claudio Tapia como presidente de la Casa Madre del fútbol argentino hasta el año 2025. En ese CE, bastante atomizado con respecto a la última gestión, hay seis vicepresidentes: Hugo Moyano, Marcelo Tinelli, Jorge Amor Ameal (Primera División), Marcelo Achile (Ascenso), Guillermo Raed (Interior) y D'Onofrio.

Tinelli participó junto a Tapia de la mesa previa que se conformó en Ezeiza. Pero luego, durante la Asamblea, se ausentó con aviso previo por compromisos laborales (hoy grabó la final del Bailando). Los que no estuvieron presentes fueron D'Onofrio y Raed.

D'Onofrio viene reclamando desde hace tiempo ser parte de la AFA. Y lo consiguió después de que fuera electo con la reestructuración de vicepresidencias (materializada en la Asamblea del 2020, en plena pandemia del coronavirus). La relación entre River -principalmente D'Onofrio- y la AFA, desde el inicio de su mandato, fue compleja. El aún presidente del Millonario se encargó de votar en contra o de abstenerse en las votaciones de la Asociación del Fútbol Argentino, inclusive en la de la elección de Tapia.

El vínculo entre River y la AFA llegó a tal punto de tensión que Gallardo habló de "guardia alta", lo cual fue defendido por D'Onofrio. La "guardia alta" no solamente hacía referencia a Tapia, sino también a Daniel Angelici. Hace poco tiempo, el propio D'Onofrio llegó a declarar que el ex presidente de Boca "tenía ciertos derechos" en la AFA "que quizás otros no tenían".

Sin embargo, en el último tiempo, todo pareció mejorar. En las últimas semanas, D'Onofrio brindó reportajes asegurando que se siente cercano a la actual conducción de la AFA. Por eso, llamó la atención que hoy, después de las declaraciones públicas positivas, el todavía máximo dirigente del club de Núñez pegara el faltazo.

Lo cierto es que, pese a los guiños públicos de D'Onofrio, algo se olfateaba, ya que River venía expresando en voz baja en AFA que podía abstenerse nuevamente a votar la reestructuración de ascensos y descensos. El propio presidente del Millonario, en diversas entrevistas, sostuvo que debían alcanzarse antes los 22 equipos en Primera. A último momento, River decidió acompañar la moción final.

La ausencia de D'Onofrio no pasó desapercibida y fue uno de los grandes temas de conversación de la Asamblea. Tanto sus pares de Comité Ejecutivo como representantes de los clubes no tomaron bien que no haya estado presente en Ezeiza.