El cierre de campaña de Cristina Kirchner del día de ayer en el estadio de Racing de Avellaneda es un claro ejemplo del país que queremos dejar atrás. Por lo menos es lo que creemos la mayoría de los argentinos. Es una gran irresponsabilidad por parte de los organizadores haber contratado a barras de Racing para realizar la seguridad del acto. Desde el Ministerio de Seguridad junto a la APreVIDe, y todas las jurisdicciones del país, venimos trabajando desde hace casi 2 años para erradicar a los violentos de las canchas, venimos juntamente luchando para que esos delincuentes no sigan haciendo tanto mal a nuestro fútbol y a nuestra sociedad. 
Ver a las distintas facciones de la barra, y a varios de sus líderes implicados en distintos delitos graves, fotografiarse con la ex-Presidente Cristina Fernández, ver  a su hijo parado en el “para avalancha” como si fuera un jefe barra, no sólo muestra los vínculos de los barras con miembros del gobierno anterior, sino que además deja en evidencia que no hay respeto por los ciudadanos a los que nosotros tenemos el deber de cuidar y proteger. Muestras como estas son la razón por la que la sociedad en su mayoría apoya el cambio y reclama por un país que no quiere volver atrás.