(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Mientras San Lorenzo sigue anclado a un presente poco prometedor en lo deportivo está bastante por debajo de la mitad de tabla y está out de la Copa Sudamericana, su presidente Matías Lammens sigue con la mente en lanzarse a pelear por la CABA en 2019.

Lammens, eso sí, intenta no quedar pegado a ninguna de las caras visibles de la política nacional: ni Mauricio Macri, ni Sergio Massa y mucho menos Cristina Kirchner. El mandatario azulgrana busca romper por afuera y, en ese sentido, criticó con munición gruesa a los "K": "Ni loco voy con el kichnerismo, le deben muchas explicaciones a la sociedad. ¿Por qué voy a justificar yo los bolsos de López?", le dijo a "La Nación". 

Lammens se define de centro-izquierda y sueña con crear una estructura paralela a los grandes partidos políticos, sabe que el actual gobierno empezó así, siendo un partido vecinal que vino a tercear en la dicotomía peronismo-radicalismo. De todas maneras, tampoco quiere ser vinculado al sindicalismo más duro. Es por eso que, en un tiro directo a Hugo Moyano, presidente de Independiente, criticó la Misa de Luján de la semana pasada: "No todo vale contra Macri", advirtió.

Mientras infla el sueño de la vuelta a Boedo y mientras San Lorenzo camina la cornisa en la Superliga y se arriesga a otro año sin copas Internacionales, Lammens también empezó a jugar con decisión en la arena política nacional. ¿Englobado en qué sector? No queda muy claro, por ahora, el presidente de San Lorenzo se plantea así mismo como un "outsider".