[De la redacción de DOBLE AMARILLA] La visita de la primera línea de los dirigentes del fútbol mundial en Buenos Aires era el amplificador ideal para potenciar la candidatura sudamericana para el Mundial 2030 y tanto Conmebol como los tres países candidatos tenían claro que el Congreso de hoy era una oportunidad única para buscar adhesiones fuertes.

Sin embargo, desde hoy la lejana Londres entendieron que era el momento de golpear y marcar la cancha: entonces los ingleses dejaron trascender en un círculo ampliado las particularidades de su candidatura y la firme intención de celebrar el centenario de los Mundiales en su casa.

Una de las cuestiones más fuertes de los detalles que trascendieron ayer fue que va a ser una candidatura británica y que va a incluir sedes en los otros países del Reino Unido: Gales, Escocia, Irlanda del Norte y hasta hay una opción de extender esta opción a dos partidos en Dublín como gesto a Irlanda.

Este golpe de unión, que tanto le gusta a la FIFA (como también al Comité Olímpico Internacional) es un condimento más para sostener el slogan que la Copa vuelva al lugar donde se creó el deporte para celebrar el centenario de su competencia más importante.

Británicos creadores del fútbol celebran el centenario es un posible lema para la candidatura que esperará el final de Rusia 2018 para hacer oficial sus aspiraciones que espera tener el respaldo en bloque de todos los países europeos, para repetir la experiencia de 1966.

De esta manera, la rivalidad sudamericana-europea se plantea como una puja para quedarse con el Mundial 2030, que también cuenta con la aspiración de Egipto para presentarse, aunque está esperando la suerte de Marruecos en su lucha con Estados Unidos-Canadá-México para la Copa del Mundo 2026.

Sin embargo, el tercer invitado fuerte a pujar por este sueño del centenario de los Mundiales que todavía no se sabe si es un deseo o una realidad es China: el mercado de mayor proyección y realidad para FIFA.

Infantino está negociando con los líderes políticos y futbolísticos de este imperio asiático para que postergue cuatro años su deseo mundialista y puje por la sede de 2034 para no tener tres grandes contendientes para el centenario, pero el empuje chino no quiere más postergaciones para ser la tercera sede asiática tras Corea-Japón 2002 y la que será en Qatar 2022.