(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Los números no le dan, al menos, para transitar la campaña con cierta tranquilidad. De esta manera, buena parte del destino electoral queda supeditado a los resultados deportivos. Out de la Copa Argentina, a Boca le queda la gran misión: ganar la Libertadores. 

En este escenario, Daniel Angelici y su equipo más cercano busca salidas, acuerdos y alianzas que terminen de fortificar un armado oficialista que si bien no está débil, no llegar a ser lo fuerte que desean (desde adentro y desde afuera). Las encuestas marcan que Christian Gribaudo le saca a los opositores (antes de conocerse los últimos movimientos de piezas) entre 4 y 5 puntos. Con el cimbronazo que representaron las PASO a nivel nacional, Mauricio Macri no puede estar tranquilo con esos datos. De yapa, a menos de 4 meses de las elecciones ya no hay mucho tiempo para instalar un nuevo candidato, Angelici no puede ir por la re reelección y el vice ‘Royco’ Ferrari no sólo que se fue de la CD, sino que se uniría al principal rival electoral, José Beraldi.  

Aparte de analizar fuertemente la chance de que Mauricio Macri sea el candidato oficialista en diciembre, desde la actual conducción de Boca se reunieron con referentes internos y con gente reconocida en el mundo Boca, aunque más no fuera por su condiciones de hinchas y socios reconocidos. Por ahora, los resultados de las cosechas de las reuniones, es pobre. 

Ante esto, en una reunión en el cierre de la semana, se analizó la chance de que Daniel Angelici le ofrezca a Juan Román Riquelme sumarse a la lista oficialista. ¿Pedido genuino para sumar al crack e ídolo y trabajar en conjunto, o movida política para acelerar la decisión del ex 10 y exponerlo ante la negativa de formar parte de los comicios? En caso de que Riquelme no de lugar a la invitación y se baje de todas las posibles ofertas similares que le lleguen, Angelici sacaría de la cancha a un posible rival y un claro problema en caso de tenerlo de la vereda opuesta. 

Por otro lado, dejar a Angelici negociar con Riquelme puede ser un arma de doble filo para las intenciones de Macri de retener el club. El sabido que el único que hoy por hoy puede convencer a Riquelme de mantenerse al margen de la votación del club es el actual Presidente de la Nación, que en este momento (más allá de mostrar su interés por Boca) está pasando semanas mucho más importantes que definir el armado de unas elecciones internas. De todos modos, no se descarta que haya un encuentro entre Macri y Riquelme en las próximas semanas. 

Por ahora, la orden de Mauricio Macri es clara: el oficialismo tiene que formar una lista fuerte y amplia, en caso de que no sea él candidato. El mensaje que se bajó fue: hay que sostener al candidato y darle una base importante. La idea es lograr alianzas o acuerdos, concretar el regreso de gente que se haya ido del sector oficialista, tener caras que arrastren votos y que haya personajes del fútbol que sostengan en cuanto a imagen a la lista.