Unión atraviesa un complicado momento institucional, tras la desaprobación por parte de los socios de la memoria y los estados contables del ejercicio finalizado el pasado 30 de junio y del presupuesto para 2023. La Asamblea Ordinaria convocada para darle tratamiento a estos documentos terminó en escándalo con insultos, amenazas y cánticos contra la dirigencia encabezada por Luis Spahn. 

Cabe recordar que el dirigente fue reelecto al frente de la institución hace algunos meses tras un proceso eleccionario repleto de trabas e intervenciones judiciales. 

A pesar de que el balance arrojó un superávit de $195.697.283,93 el mismo fue desaprobado por la mayoría al igual que la memoria. Tampoco contó el visto bueno el Presupuesto de recursos para el ejercicio 2023. 

Tras aquella tarde noche de tensión del lunes, la dirigencia del 'Tatengue' emitió un duro comunicado apuntandole directamente a los socios que causaron desmanes. 

"Nunca más debemos permitirnos como Club lo que sucedió el día lunes, donde un grupo de asistentes insultaron desde el inicio hasta el final de la asamblea, hubo agravios, amenazas, se afectó la libertad de expresión de los asociados que querían tomar la palabra y para terminar, en el final, escupieron a uno de los referentes de una agrupación en la salida del recinto".

Luego apuntan: "Atento a los registros de video realizados por el Club en cada Asamblea y las cámaras de vigilancia de los accesos y salidas, se evaluarán las imágenes y en su caso se sancionará de acuerdo a lo establecido en el estatuto del Club o incluso, de acuerdo a la gravedad, se realizarán las denuncias penales que pudieran corresponder".

Para sentenciar: "En este sentido se informa a los socios y socias que se tomarán medidas preventivas con las autoridades que correspondan y se realizará un monitoreo exhaustivo del desarrollo de la próxima asamblea para que transcurra en condiciones de respeto, diálogo honesto y la tolerancia que todas y todos los Unionistas nos merecemos".