(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El Consejo de la Conmebol se reunió ayer en la ciudad de Lima y decidió por unanimidad anticipar el llamado a elecciones en las que nuevamente se presentará Alejandro Domínguez como único candidato a presidir el ente sudamericano en el período 2019-2022. Oficialmente la medida fue tomada bajo la excusa de revalidar y "consolidar las reformas que su administración viene liderando con el objetivo de institucionalizar, profesionalizar y transparentar el fútbol sudamericano”. Sin embargo, el cambio de planes tiene mucho olor argentino. Es que según confirmaron fuentes de Conmebol a Doble Amarilla, Claudio Chiqui Tapia, será el vicepresidente segundo en la lista de Domínguez con lo que Argentina recupera el peso regional.

Tras la renuncia de Luis Segura, la Argentina había perdido fuerza tanto en el ente sudamericano como en FIFA quedando insólitamente desguarnecida políticamente tras años de fuerte peso específico en el mapa del poder del fútbol. Ahora todo cambia. Tras meses de negociación en el último Congreso de Punta del Este empezó a sellar este adelantamiento en las elecciones que debían realizarse en 2020. La medida fue prácticamente adhoc de Argentina ya que una renovación de autoridades era la chance más concreta para mover fichas y cargos.

¿Cómo llega Argentina a la vicepresidencia? Como ya venía contando Doble Amarilla, en los últimos meses desde Viamonte aceleraron la presión sobre Domínguez. “Ya cumplimos con todo lo que nos pidieron. Normalizamos AFA, presentamos números que marcan una recuperación de la economía. Es hora que volvamos a tener el lugar que corresponde”, fue el argumento que reunión tras reunión repetían Daniel Ferreiro y Pablo Toviggino, dos de los alfiles de Tapia que participaron de la negociación.

Pero para que Argentina suba, otra federación debe bajar. Según pudo saber Doble Amarilla la lista que llevará a Domínguez a la reelección, fue armada con bisturí fino y será presentada en el Congreso de Conmebol que se realizará en abril en Buenos Aires. Para que Tapia pueda ser vicepresidente bajarán de la vicepresidencia al colombiano Carlos Jesurún, quien sí mantendrá su cargo miembro del Consejo de FIFA. La papeleta llevará al venezolano Laureano González como candidato a vice primero y a Claudio Tapia como vice segundo. La vicepresidencia tercerá seguirá en manos del chileno Arturo Salah. Otra sorpresa podría ser que uno de los cargos de representante en FIFA vaya a ocuparlo el peruano Edwin Oviedo, hoy de muy buena sintonía con Alejandro Domínguez.

La medida muestra un dato no menor. Domínguez decide gobernar con un eje de poder compacto contentando tanto a la Argentina como a Brasil, que mantendrá con el polémico Fernando Sarney su butaca en FIFA. Ademas, de la vicepresidencia Argentina capturará algunos cargos clave relacionados a la tesorería y Torneos. Seguramente esto abrirá un nuevo capítulo de rosca local para dirimir qué dirigentes argentinos ocuparán esos cargos.

Si bien el adelantamiento favorece claramente a las aspiraciones argentinas, no es el único motivo para Domínguez. En Paraguay aseguran que el paraguayo sigue muy de cerca las elecciones presidenciales que se darán el 22 de abril en tierras guaraníes. Domínguez tiene una estrecha relación con Horacio Cartés, pero tiene un vínculo más distante con Mario Abdo Benítez, el candidato oficialista para suceder al actual mandatario paraguayo. “En el entorno de Abdo Benítez hay muchos que no pueden ni verlo a Domínguez y es probable que el adelantamiento de las elecciones también tenga que ver con garantizarse la reelección en un clima político aún favorable para el en Paraguay”, analizan desde Asunción.

Lo concreto es que finalmente Tapia, a un año de su asunción, tendrá en el próximo Congreso de Conmebol la foto que tanto esperaba. Para ese evento vendrá nuevamente al país el mismísimo presidente de FIFA, Gianni Infantino, y el “Chiqui" podrá celebrar que formalmente será presentado como candidato a vice de Conmebol.