Adrián "Oso" Fernández dejó la comisión directiva de Racing y la presidencia del fútbol amateur (no hay reemplazante definido, pero su lugar lo ocupará transitoriamente Claudio Velo). En una reunión que tuvo lugar en la tarde de este jueves, la dirigencia de la Academia también elevó el caso al Tribunal disciplinario para que analicen su condición de socio.

Los últimos dos hechos que involucraron en primera y tercera persona a Fernández fueron la gota que rebalsó el vaso. En el primer caso, su hijo, en Twitter, maltrató a Miguel Gomis, histórico formador del club y descubridor de Diego Milito. Luego, se filtraron audios de él cuestionando al 22 y a otros miembros.

Lo cierto es que, consumada la renuncia del vocal, la Academia atraviesa uno de los momentos institucionales más difíciles de los últimos años. Víctor Blanco tiene la difícil misión de unificar un frente político con diferencias ideológicas evidentes.

Todo comenzó a gestarse aquel 22 de noviembre, con la salida de Diego Milito de la institución. Fue el propio mánager quien confirmó, en primera persona, su alejamiento del club, lo que provocó un terremoto político. "Tomé la decisión de no continuar, a partir de la próxima gestión, siendo el Secretario Técnico del club. El motivo es muy simple: no comparto el modelo del club ni las ideas del presidente", disparó Milito en los primeros segundos de video.

Esta situación política generó un duro golpe anímico sobre Víctor Blanco, presidente de Racing. Tal es así, que evaluó por primera vez su continuidad en el club. Mantuvo charlas con su círculo íntimo para definir si iba o no por un tercer mandato (lo terminó haciendo y ganó por amplia diferencia). 

Lo cierto es que en la vida política de Racing existen, desde hace mucho tiempo, dos bandos: Adrián "Oso" Fernández, Roberto Torres, "Roby" Martínez y Miguel Jiménez de un lado; y Alfredo Chiodini, Christian Devia y Daniel García como "líderes" del otro. El resto de la CD, en su mayoría, está encolumnada detrás de este último sector. 

Diego Milito, por su parte, tenía diferencias sustanciales con el primer grupo, algo que quedó evidenciado y que se terminó de confirmar en los audios que se filtraron del, hoy, ex vocal de CD. “Si quiere ganar las elecciones que se presente el boludo este”, fue una de las fuertes frases de uno de los mensajes de voz, haciendo alusión al ídolo académico.

Asimismo, fue "Roby" Martínez, el cuñado de Horacio Rodríguez Larreta y responsable de Marketing y Comunicación del club, quien decidió y bajó línea a los empleados para que no se nombre, bajo ninguna circunstancia, a Diego Milito en las redes oficiales, lo que causó un rechazo generalizado en el hincha. Es preciso mencionar que es una de las áreas más cuestionadas en Racing y en la cual pidieron los fanáticos del club, en simultáneo a la renuncia de Fernández, un cambio de manera urgente. El dirigente cuenta con la impunidad política lógica por ser familiar directo del actual Jefe de Gobierno Porteño y líder del principal frente opositor (Cambiemos). Sin embargo, es una impunidad que tiene fecha de vencimiento. Y los socios se lo hicieron saber en las diferentes plataformas en las últimas horas. 

Según pudo saber Doble Amarilla, tal como sucedió en 2020, Blanco vuelve a quedar en una puja y tironeado entre el respaldo a quienes le dieron el empujón y respaldo para llegar al sillón de la presidencia de la Academia y la estela que dejó Diego Milito con Gomis dentro del club, que tiene el casi total respaldo de los hinchas. Incluso, desde el regreso de los fanáticos al estadio entre el fin de ciclo de Úbeda y el comienzo de la etapa de Gago, el grito de guerra continúa siendo "Milito es de Racing... de Racing de verdad".

Sin embargo, Blanco optó por la cautela y el silencio en tiempos complicados y no tomará ninguna decisión en el corto plazo. Sin embargo, las tensiones políticas existen y Racing deberá buscar la armonía ante un panorama complicado tanto en lo político como en lo futbolístico.