(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El 2020 de Walter Montillo será inolvidable, pero no por lo bueno. Más bien todo lo contrario. El ex San Lorenzo y Tigre, hoy en la U de Chile, perdió a su padre y a su abuelo a causa del coronavirus, enfermedad que también sufre su madre, aunque en un nivel mucho más leve. Ahora, el jugador se plantea, según confesó, la chance de colgar los botines.

"Por el momento, este es el último año que voy a jugar. En noviembre voy a evaluar si estoy para seguir o no", aseguró el volante en declaraciones al diario "El Mercurio" trasandino.

También abrió su corazón y reconoció que le dolió mucho más la muerte de su papá, porque ambos estaban recuperando su relación después de varios años sin hablarse: "Hace tiempo que estábamos distanciados con mi papá, cerca de seis años. El año pasado empezamos a hablarnos nuevamente, íbamos de a poco, estábamos ahí y pasó esto. Me golpeó lo de mi viejo, porque uno está lejos y no puede ayudar", se lamentó.

"Me tocó la bolilla a mí. Desde lejos, en cuarentena, uno no puede ayudar y eso es lo que más me duele, porque a la distancia uno no puede hacer mucho. Una vez que aíslan a las personas, uno tiene que empezar a creer en los médicos y rogar para que todo salga bien. Lamentablemente, con mi abuelo y mi papá no pasó, pero mi vieja está luchándola y eso me pone contento", cerró, en medio de un momento de profundo pesar.