(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Mientras continúa retirado de la vida pública, refugiado en su casa de Casteldefells y en compañía de Antonela y sus tres hijos, Lionel Messi recibió la noticia que se ha quedado sin villano. Cristiano Ronaldo, después de 9 años, decidió dejar el Real Madrid y se irá rumbo a la Juventus de Italia. Es decir, abandona LaLiga. Fin a una rivalidad que duró el tiempo que el portugués vistió de blanco.

Es que además del Real Madrid-Barcelona, histórica rivalidad en España, durante esta casi década, también existió la rivalidad Cristiano vs Messi, Messi vs Cristiano. Ambos se potenciaron, porque pelearon por todo. Ambos ganaron, en estos 9 años, 9 Balones de Oro, cinco de Lionel Messi (2009, 2010, 2011, 2012 y 2015) y cuatro de CR7 (2013, 2014, 2016, 2017). El portugués también tiene cinco, contando el de 2008 que ganó cuando jugaba en el Manchester United.

También durante estos 9 años, Messi conquistó tres Champions League con el Barcelona y CR7, cuatro con el Madrid, tres de ellas en hilera. Siempre han peleado por la "Bota de Oro" a nivel español y continental. Lo que hacía uno, inmediatamente debía ser superado o igualado por el otro. 

Messi tenía en Cristiano a su Guasón, a su némesis, a su "enemigo", a su villano, al jugador con el que competía hasta cuando no quería competir, y que además llevaba la camiseta del más acérrimo rival del Barcelona. Sin él en el medio, Lionel quedará con todos los focos apuntándole a él y eso, en un año en que la idea que tiene en mente es reconstruir al Barcelona e ir nuevamente por la conquista de Europa, puede ser peligroso. Quedará casi con la misma exposición que tiene en la Selección Argentina. 

En LaLiga, nadie se le podrá acercar a Lionel Messi. Tal vez si Eden Hazard consigue ser campeón del Mundo en Rusia y luego llega al Madrid (el rumor por estas horas) ahí aparezca un "oponente" para Lionel. Quizás la prensa española empieza a construir a Isco (llamado a ser la bandera del Madrid post CR7) en ese sentido o la franquicia Griezmann en Atlético Madrid hacen subir sus acciones, más teniendo en cuenta que acaba de rechazar al propio Barcelona.

Lo cierto es que, sin Cristiano, Messi pierde la vara. La pondrá él sólo. Será alta, baja o mediana. Pero dependerá únicamente del rosarino. Eso, en un animal de la competición como es Messi, podría ser contraproducente.

¿Y Neymar? Así Ney recale en el Real Madrid (otro rumor) no será lo mismo. El 10 del Scratch y el 10 de la albiceleste trabaron gran relación cuando el brasilero estuvo en Barcelona, incluso, ganaron una Champions juntos en el año 2015. Así que, aunque defiendan intereses opuestos, la gran amistad que los une hará imposible la dicotomía al nivel que la había con CR7.

Sin embargo, pese a querer continuamente enemistarlos, entre Lionel y Cristiano no hubo más que respeto y competencia. Incluso, a uno le corean el apellido del otro para molestarlo. Nunca fueron amigos, siempre fueron competidores al más alto nivel. Ahora, sin CR7, Messi pierde a su villano favorito. ¿Encontrará otro en España? ¿Será una temporada más fácil para él sin una competencia continúa? ¿Le inventará la prensa un nuevo 'enemigo'?

Todas preguntas hoy sin respuesta, lo cierto es que, en Europa, Messi y CR7 seguirán peleando por la Champions: uno para reconquistarla, otro para conseguir ponerla en las manos de la Juventus. Pero a nivel local se ha apagado la competencia doméstica más pareja, apasionante y vibrante del S XXI en el Planeta Fútbol. Sin dudas, Messi también va a extrañar a Cristiano.