(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) No fue simple esta vez. Además del juego, el Barcelona necesitó magia, y ahí apareció Lionel Messi, el mejor de todos, para colgarla del ángulo de tiro libre, a solo 6 minutos del final y decretar la victoria 2-1 sobre el Alavés.

Barcelona no jugó bien. Coutinho, recostado sobre la derecha, se sintió incómodo y no influyó en el juego. El visitante se puso en ventaja gracias a una contra que selló Guidetti. El empate lo estampó Luis Suárez y luego Messi definió la historia de una manera tan bella como eficaz.

El equipo de Valverde es el líder del campeonato con 11 puntos de ventaja sobre Atlético de Madrid y mantiene 19 puntos de diferencia respecto al Real Madrid, que se ubica en la cuarta posición.