(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Se acabó el reclamo del VAR al árbitro. La UEFA, a través de su director de arbitraje, Roberto Rosetti, manifestó su intención de sancionar con una tarjeta amarilla a todo aquel jugador que solicite el videoarbitraje en mitad de un partido.

"Es inaceptable que un jugador pida el VAR. Debe ser amonestado de igual forma que cuando pide una amarilla para uin contrario", manifestó el ex árbitro italiano. Una sanción que se producirá en todas las competiciones UEFA, empezando por la Champions League.

Será, asimismo, el estreno de la herramienta de videoarbitraje en la competición de mayor lustre en el panorama europeo. Si bien se esperaba que estuviese para la próxima temporada, el buen papel en varias de las ligas más importantes ha adelantado su uso.

"El VAR no lo puede resolver todo. Detrás de los monitores hay personas y pueden cometer errores. Es importante que se reduzca el tiempo, pero no ha de interferir en la decisión para tomar la decisión adecuada", auspició Rosetti.

"El objetivo es proteger el fútbol. No queremos destruir el juego, y las decisiones deben ser cuestiones fácticas", señaló Rosetti, que añadió que el VAR se encargará también de entrar a valorar "gestos racistas evidentes", que el árbitro no haya visto.

Así pues, la UEFA quiere acabar con las protestas de los jugadores por el videoarbitraje. Todo aquel que haga la señal en forma de cuadrado se verá expuesto a que el colegiado le enseñe una tarjeta amarilla.