(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El 2020 empezó agitado a nivel socio-político. Es que, después de años, Estados Unidos volvió a atacar a Irán. El objetivo fue cumplido: el asesinato de Qasem Soulimani, general de la Guardia Revolucionaria iraní. Pero la escalada no se detiene y aún no se ve dónde podría parar.

Irán ya contestó al bombardear dos bases de Estados Unidos en Irak. Además, crecen las sospechas sobre los motivos del accidente de un avión comercial de Ucrania, que se estrelló en las afueras de Teherán dejando 176 muertos. ¿Y qué tiene que ver el deporte en todo esto?

Es que la Guardia Revolucionaria iraní ha afirmado que los aliados de EE.UU. en la región serán atacados si ayudan al país gobernado por Donald Trump desde sus territorios, según informa RT y, varios, apuntan a Arabia Saudita como uno de los aliados del "Tío Sam".

"Al menos 104 objetivos de las posiciones de los estadounidenses y sus aliados en la región han sido identificados y si los estadounidenses vuelven a cometer un error, esas posiciones serán atacadas", manifestaron los iraníes.

La advertencia está dirigida, además de a Arabia, a Kuwait, Baréin, Jordania e Israel. Y, claro, a Arabia. En Arabia empieza hoy la Supercopa de España, con la presencia de los planteles de Real Madrid, Barcelona, Atlético Madrid y Valencia. Además, en ese país, se está corriendo el Dakar. Por lo cual las medidas de seguridad se han extremado. 

Por el ataque a la base de EE.UU, un responsable de la Guardia Revolucionaria de Irán ha confirmado que al menos 80 militares han sido asesinados. Por eso, dónde terminará la escalada es indescifrable, al menos por ahora. Por su parte, Irán anunció que si Estados Unidos no contraataca, cesará la ofensiva militar. ¿Qué hará la Casa Blanca? En el medio, el deporte, otra vez a merced y cruzando los dedos para no quedar en el medio del fuego cruzado.