Costa Rica se convirtió en el primer país latinoamericano en concretar la vuelta del fútbol, en medio de la pandemia de coronavirus. Cabe destacar que el retorno de la actividad se da en un contexto en el que se deberán tomar estrictas medidas de seguridad para evitar el contagio del COVID-19. Además, los estadios no podrán recibir hinchas.

Doble Amarilla dialogó con Facundo Zabala, futbolista de Liga Deportiva Alajulense, uno de los equipos protagonistas de la liga costarricense. El jugador contó cómo se encuentra la situación en el país y reveló qué medidas deben tomar tanto en entrenamientos como en los partidos. ¿Pueden festejar los goles? ¿Cuál es el protocolo que hay que cumplir?

- Doble Amarilla: ¿Cómo está la situación sanitaria en Costa Rica y cómo fue volver a jugar al fútbol después de tanto tiempo?
- Facundo Zabala:
Acá por suerte no fue tanto como en otros países, debe ser uno de los países que mejor está. Primero por el clima y segundo porque acá se hizo mucho caso, no hubo cuarentena total pero la gente siempre respetó los protocolos y esas cosas, gracias a Dios la pasé bien, con respecto a lo que veo en otros lados. Con respecto al fútbol si, muy contento porque somos unos de los pocos países de América que volvió a jugar y eso es algo muy lindo, obvio que faltó un poco de ritmo en la competencia, pero me sentí muy bien, estoy muy agradecido.

- DA: ¿Hay algún protocolo en particular o situaciones que les han marcado que no pueden suceder adentro de la cancha?
- FZ:
Como en todos lados, no escupir y no sonarse la nariz, algo por lo que al principio querían sancionarnos con una amarilla, pero al final quedó en una advertencia, igual que en Alemania. Nos piden que usemos el barbijo en el vestuario cuando nos cambiamos y sacárnoslo cuando entramos a la cancha. Antes de entrar hay un lugar con alcohol en gel, nos piden que lo hagamos separados pero una vez que entras, no se permite eso de escupir o sonarse la nariz.

- DA: ¿En el gol la idea es que no se abracen?
- FZ:
No, sólo choque de codo o de puños, no mucho más. Obviamente no hay sanción, pero uno sabe que no lo puede hacer y eso se respeta mucho.

- DA: ¿Cómo tomas esta nueva normalidad a la hora de jugar y esto de que sea sin público?
- FZ:
La verdad que es extraño porque en este caso, jugar sin público no es que te desmotiva, pero sí que falta una motivación. Además, imagínate que no festejar un gol y todas esas cosas es muy complicado, parece un poco extraño, pero creo que al pasar los partidos nos iremos acostumbrado un poco a todo esto.

- DA: ¿Les hacen testeos, cada cuánto? ¿Les toman la temperatura?
- FZ:
Siempre antes de entrenar te toman la fiebre y nos hicieron un test cuando volvimos a empezar las prácticas y por ahora nada más. En los partidos antes de entrar a los vestuarios también nos toman la temperatura y no mucho más hoy por hoy.

- DA: ¿Actualmente cuántos casos de coronavirus hay en el país?
- FZ:
Mira, te digo de memoria y rápido, sé que hubo como 4 mil infectados desde que todo empezó, pero se recuperaron la mayoría, debe haber 500 activos, pero todo acá se manejó muy bien. Los cines abrieron en un 25%, los shoppings también y todas esas cosas, así que la verdad es que está bastante bien.

- DA: ¿Te pusiste a pensar que si te volvías a Argentina, podías llegar a perderte de jugar?
- FZ:
Si, en un principio cuando esto empezó hace dos meses lo primero que quería hacer era irme, pero me puse a pensar que era viajar con mi novia y quizás perjudicar a mis padres que son grandes, sobre todo a mi papá que es diabético y entonces eso me detuvo. Menos mal porque unos días después se puso la regla de que si te ibas, te sacaban la residencia, como le pasó a algunos jugadores que no pueden volver.

- DA: ¿Hay jugadores que perdieron la residencia y no pudieron volver a jugar?
- FZ:
Si, hay como seis extranjeros a los que le pasó eso y no sé cómo seguirá, pero ya no pudieron volver, eso seguro.

- DA: ¿Cómo lleva todo esto a la distancia, con la familia?
- FZ:
Es un poco complicado, se extraña mucho y gracias a Dios estoy con mi novia. Lo manejo como puedo, hago videollamadas todos los días y ellos miran los partidos, entonces estamos en comunicación. El año pasado pudieron venir y eso me dejo más tranquilo, ahí vamos. La verdad que se extraña bastante, pero uno tiene que salir adelante por ellos.