Cada vez son más los futbolistas que deciden darle una oportunidad a las ligas árabes pero, también, son muchos los que prueban suerte y deciden regresar a Europa, pese a la importante suma de dinero que prometen los clubes.

Aymeric Laporte llegó al Al-Nassr, equipo que actualmente juega Cristiano Ronaldo, a finales de agosto y luego de haber disputado 20 partidos, ya amaga con volver al Viejo Continente.

“Hay muchos jugadores que están descontentos, pero bueno; cada día lo estamos trabajando, negociando por así decirlo, y a ver si se mejora un poquito porque esto es algo nuevo para ellos también, tener jugadores europeos que tienen ya una trayectoria larga", comenzó diciendo el defensor.

Pese a no tener muchas facilidades en el nuevo destino, reconoció en diálogo con Diario As: “Es un gran cambio comparado con Europa, pero al final es todo adaptación”.

“La vida para ellos… se lo toman todo a la ligera. El ultimátum que les puedas dar no les importa. O sea, van a su bola realmente. Negocias una cosa y luego no te la aceptan después de habértela firmado. Te la pelean. Es un poco un rollo que en Europa no sé yo”, destacó.

Además, lanzó una leve diferencia entre los clubes de Europa y la Saudi Pro League: “Sí, pero no suficientemente para mi gusto. Es decir, que en Europa te pagan un buen sueldo, pero te cuidan bastante más”.

Sobre su posible partida, admitió: “De momento, no me lo he planteado, pero si estoy decepcionado en tan poco tiempo, te preguntas qué hacer. Aún no ha llegado ese momento, pero de cara al futuro podría serlo si esa dinámica sigue así”.

“A nivel de calidad de vida, me esperaba algo distinto porque al final aquí te pasas tres horas al día en el coche. Riad es una pasada de tráfico, de tiempo perdido dentro del coche. Tiene puntos muy buenos y otros muchos malos. Los centros comerciales son realmente espectaculares. Cuidan bien los detalles, tienen muchas cosas para los críos, está todo limpio. Pero si tienes que ir a un sitio y tienes que pasar hora y media en el coche, ni te conviene ir allí. El tráfico es un punto negativo”, concluyó el jugador de 29 años.