(De la redacción de DOBLE AMARILLA) Se ve que la competencia no es únicamente desde el terreno de jugo, sino también en la planificación estratégica. El Liverpool accedió a la base de datos del Manchester City durante 8 meses para extraer datos de los ojeadores. De multa, tuvieron que pagar £ 1.000.000.

El hecho se lo reconoce como una de las peores "canalladas" entre clubes ingleses. Los Reds ingresaron al sistema de scouting de los Blues donde se analizan jugadores, posibles refuerzos, proyectos y demás. Esto ocurrió entre junio de 2012 y febrero de 2013 durante 8 meses ininterrumpidos. 

El hecho se conoce ahora ya que hubo un acuerdo de absoluta confidencialidad, donde el Liverpool aceptó su culpa y pagó la indemnización correspondiente. La idea de este "hackeo" provino del Director Deportivo Michael Edwards, junto con otros 2 colaboradores que anteriormente trabajaron para el City.

El equipo donde actualmente dirige Guardiola se percató de esta situación al ver que buena parte de los refuerzos que al menos planteaba el City, eran saboteados o rivalidados por el Liverpool. De hecho, los Blues aceleraron en aquel entonces las contrataciones de Fernandinho y Jesús Navas, ya que sabían que la información estaba cruzada.