(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Al parecer, en Serbia no llegó el coronavirus. O, al menos, no impactó en el fútbol. Se vivió en ese país el "Derby Eterno" entre Estrella Roja y Partizan, que ganaron los últimos 1-0. Lo que para Serbia es normal, se ha vuelto particular dado el contexto: estadio lleno, fiesta de bengalas y el color de siempre. ¿Medidas sanitarias? ¿Distanciamiento social? Nada de eso.

El Partizan fue local en el partido por la semi del torneo, ganó 1-0 y su gente, que colmó el escenario, armó la fiesta habitual en otros tiempos, no muy lejanos, pero no actuales, definitivamente.

Los hinchas se mostraron unos encima de otros, sin barbijo y se mezclaron en el momento de clímax, con el gol de Bibras Natcho, a los 12 minutos del segundo tiempo. Antes de iniciar el partido, los jugadores debieron ayudar a los árbitros y asistentes a retirar las cientos de bengalas que cayeron al césped. 

Los jugadores tampoco se privaron del contacto: al momento del gol y en el final, hubo abrazos y tumulto. Lo curioso es que en el medio de la locura sí se ve que los fotógrafos sí usan barbijo para realizar su trabajo. 

El momento del gol, el fotógrafo con barbijo para desubicado, a contramano del mundo.
El momento del gol, el fotógrafo con barbijo para desubicado, a contramano del mundo.