(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Muerto el presidente, ¿viva el presidente? El fallecimiento de César Salinas desató una interna tremenda en el fútbol boliviano. En realidad, varias internas, desde la histórica del país entre La Paz y Santa Cruz de la Sierra, la de origen, entre fútbol amateur y fútbol profesional e incluso la judicial, entre lo que dicta al Justicia ordinaria y lo que marca la Justicia del fútbol. 

En este momento, la Federación Boliviana de Fútbol está presidida por...¿Marco Rodríguez? ¿Robert Blanco? ¿Nadie? Lo cierto es que no está del todo claro aún. Incluso, al propia FIFA está dirimiendo a quién reconocerá como presidente del fútbol del altiplano boliviano.

¿Cómo es la situación? El Estatuto de la Federación Boliviana de Fútbol especifican que en caso de "ausencia o muerte" del presidente, se activa la sucesión y asume el primer vicepresidente interinamente. Este convoca a un Congreso que tiene la decisión de permitirle a ese vice completar el mandato o bien llamar a elecciones. 

Sin embargo, ese estatuto está en un gris legal. En Bolivia, según le cuentan a Doble Amarilla todos los estatutos deben ser aprobados por el Ministerio de Autonomías. En diciembre de 2019, la FBF reformó sus estatutos con un punto clave: ahora, dicen que el vicepresidente primero entra inmediatamente en funciones. A día de hoy, los mencionados estatutos se encuentran "en revisión" y, por lo tanto, no están en plena vigencia.

De ese gris que hay ahí se agarró Robert Blanco, Vicepresidente 2do de la FBF para reclamar la presidencia. ¿El motivo? En el año 2017, último estatuto vigente y aprobado de la FBF, él ostentaba la primera vicepresidencia y no Marco Rodríguez. Acá hay que hacer un alto: Rodríguez es del riñón del fútbol amateur de Bolivia, en tanto que Blanco viene del fútbol profesional.

Para que el fútbol no quede al mando de alguien que viene del amateur, varios clubes se encolumnaron detrás de Blanco e intentaron tomar la presidencia afirmados en este "vacío legal" que existe, con el estatuto "en revisión". Es más, Blanco presentó ante la Justicia Boliviana un amparo constitucional y lo ganó. Es decir, para la Justicia de Bolivia, Blanco es el presidente de la FBF.

¿Qué ocurrió inmediatamente? Que la FBF, debido a que Blanco dio paso a la Justicia Ordinaria, lo suspendió. No se puede recurrir a Tribunales Ordinarios para resolver cuestiones internas del fútbol, eso deja a la FBF como plausible de suspensión e intervención por parte de la FIFA y/o la CONMEBOL. Por eso, inmediatamente, la FBF suspendió a Blanco. Él ya no representa a la FBF. Así las cosas, el presidente para la Justicia ordinaria fue suspendido y el presidente para el fútbol boliviano y sus estatutos encuentra una gran resistencia interna en los clubes de la Primera División. 

Mientras FIFA estudia la cuestión con su departamento de legales, CONMEBOL ya reconoció Marco Rodríguez como el sucesor de Salinas.

La guerra siguió con un comunicado interno en la FBF, en la que la presidencia de Rodríguez recuerda a los empleados que Blanco ha sido suspendido y que no se le puede facilitar ninguna documentación ni papel de la FBF.

Por otro lado, y ajeno en parte a todo lo que sucede, la Selección de Bolivia entrena en el país, a la espera de conocer quién será el presidente de la Federación. Para el elenco de César Farías no se puede perder el tiempo para preparar el debut ante Brasil, de visitante y Argentina, como local. 

El comunicado interno.
El comunicado interno.