(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) El mundo habla de "Game Of Thrones", la serie que el próximo domingo llegara a su final. Uno de sus actores principales, Nikolaj Walder-Cousteau (Jaime Lannister) opinó que, para él, el "salvador" de todo iba a ser Marcelo Bielsa. Claro, "Jaime" es hincha del Leeds y el "Loco" es su DT. Eran tiempos en que el Leeds peleaba el ascenso directo, una lucha que terminó perdiendo a manos de Norwich City y Sheffield United y que terminó de claudicar ante el Derby County de Frank Lampard. Pero eso es Bielsa, un tipo capaz de meterse en una entrevista de uno de los actores del momento en uno de los Night Shows más importantes del mundo. Otra revolución sin conquista. 

Desde aquel joven entrenador de Ñubel, que logró el Apertura 1990 a este que volvió a hacer soñar al Leeds con la Premier League después de 13 años, pasaron muchas revoluciones y muy pocas conquistas. Pero siempre, absolutamente, siempre, Bielsa no pasa desapercibido. Referente para muchos de los DT top de la época, Bielsa es un caso constante del "Alumno superando al Maestro", al menos, en resultados. Algunos casos emblemáticos con el de Pep Guardiola, Zinedine Zidane y Didier Deschamps.

Bielsa consiguió poner de pie equipos derrumbados (Chile), puso a soñar a otros con grandes conquistas (Athletic Bilbao, Olympic de Marseille) y encabezó proyectos a priori pequeños pero con los que logró ser "la" noticia aunque nunca se llevó la tapa (Lille, Leeds).

En su tierra, el "Loco" consiguió ser campeón con Newell's y con Vélez. Con la Lepra fue campeón en 1990, acuñó una frase para la historia ("Ñubel, carajo, ñubel) y le tocó llorar amargamente cuando se le escurrió de las manos la Copa Libertadores, dos años después, ante Olimpia. Con el "Fortín", Bielsa logró ser campeón en 1998, una fecha antes del final. Supo administrar lo que quedaba del Vélez campeón del Mundo de Bianchi e imprimirle su sello a un equipo multicampeón. Su tarea en el José Amalfitani lo puso en el predio de la AFA y firmó la mejor Eliminatoria de la Selección Argentina en la historia, la que lo llevó al estrepitoso fracaso de Japón-Corea 2002. También con la Selección se le escapó una Copa América en la final (obvio, a la altura de su "maldición") y ganó una medalla de Oro en Atenas 2004, luego, se declaró "sin energías" y abandonó a la albiceleste, en el camino rumbo a Alemania 2006.

Bielsa le escapa (y mucho) a la grandilocuencia. Hace mucho con poco, pero el premio se lo termina llevando otro. Pero pregunten en Bilbao por Bielsa. El "Loco" llevó a los vascos a la final de Europa League 2011/12, la cual perdió 3-0 contra el Atlético Madrid, antes, volteó al Manchester United (ganó en Old Trafford), al Schalke 04 y al Sporting Lisboa. ¿Cómo se juzga ese torneo? ¿Sólo por el resultado?.

Ahora, con un equipo limitadísimo, llevó al Leeds a soñar con volver a la máxima del fútbol inglés. ¿Cómo se juzga el año? Quizás en el hecho que el Leeds quiere que continúe este la respuesta. "Frente a tanta desilusión y dolor, analizar es innecesario", remarcó Bielsa, en la conferencia de prensa post partido. Da la sensación, igual, que podría seguir ligado al elenco inglés, cuyos hinchas lo quieren tanto como para mosaiquear un "Carajo" como recibimiento a su equipo.

Antes de su aventura en Elland Road, Bielsa lideró al LOSC Lille francés. Se terminó yendo mal, en medio de la muerte de un cercano amigo y colaborador, como el profe Luis Bonini, quién fue parte de su cuerpo técnico casi toda su carrera. Ahora, las bases de ese equipo lograron ser los escoltas del PSG en la actual Ligue 1. Antes, también en Francia, había regalado "el fútbol más vistoso y más bello de la Ligue 1 en los últimos 20 años" cuando tomó las riendas del Olympique de Marsella. El equipo venía de ser sexto con sudor, y él lo llevó a ser cuarto, logró el pasaje a la Champions League y, durante todo ese año, pudo ser campeón. Una vez más, el título fue para otro.

En la Selección de Chile sentó las bases para lo que luego serían dos Copas América. Pero él no las ganó. Sí consiguió llevar a "La Roja" a un Mundial luego de 12 años, al conseguir el pasaje para "Sudáfrica 2010", Mundial del que se fue en 8vos de final, al caer con Brasil. El "Loco" marcó una revolución en "La Roja", a tal punto que luego del fracaso de su sucesor, Claudio Borghi, la federación buscó en Jorge Sampaoli un "mini Bielsa". Un estilo similar de conducción que se tradujo en el pasaje a Brasil 2014 y las Copas América 2015 y 2016, ambas ganadas a la Argentina. La piedra basal de todo eso la puso Bielsa, pero los laureles se los llevó otro. 

Así las cosas, el DT rosarino, apodado el "Loco" siempre deja locuras dónde va, pleitesía en varios de sus colegas y cosechas elogios en la prensa. El tema es que, casi siempre, se queda en la puerta del título que sella todo el trabajo realizado. Parece que en Leeds quieren que lo intente de vuelta, habrá que ver si busca su revancha o si la excursión es Ellan Road es otra más de las revoluciones sin conquistas de Marcelo Bielsa.