(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta mantienen una silenciosa confrontación política. El ex Presidente y el actual Jefe de Gobierno porteño, referentes de la oposición, poseen diferencias en las perspectivas para confrontar al peronismo desde su espacio. No obstante, con la designación del ex primer mandatario en la Fundación FIFA, apareció una nueva complejidad.

Según el periodista Román Lejtman, de Infobae, Rodríguez Larreta se juntó a tomar un café con Fernando De Andreis, ex secretario general de la Presidencia y enlace de Macri con el jefe de Gobierno porteño. En el encuentro, de Andréis le manifestó a Larreta que el ex primer mandatario estaba enojado con él porque no lo defendió "cuando le pegaron al anunciar su nominación como Presidente de la Fundación FIFA"Larreta, tajante, contestó: "Mauricio toma sus decisiones, yo tomo las mías".

Luego de conocerse que Mauricio Macri estaría al frente de la Fundación FIFA, la mayor parte del fútbol argentino expresó su absoluto rechazo: Jorge Amor Ameal, Pablo Moyano, Carlos Montaña, Rodolfo D'Onofrio, Nicolás Russo, Eduardo Spinosa, Gabriel Pellegrino, Mario Leito, Julio Ricardo Grondona y Marcelo Tinelli, entre otros, manifestaron su disconformidad. De hecho, la propia Asociación del Fútbol Argentino calificó de "inapropiada" la designación y Superliga mostró su "preocupación". En el plano político local, aunque sí hubo defensa por parte de hombres y mujeres del PRO, Larreta no se pronunció a su favor, lo cual derivó en el enojo de Mauricio Macri.

A escala internacional, Conmebol también se mostró en contra del nombramiento de Mauricio Macri en FIFA: aunque tenían sospechas de su designación, cayó muy mal, ya que fue excluida de la participación en la decisión. De hecho, su exclusión de la decisión se suma a una tensión que data de meses entre la entidad madre del fútbol mundial y el organismo rector del fútbol sudamericano y cuyo detonante fue la creación por parte de FIFA de la Asociación Mundial de Clubes, entidad que inventó Infantino para cultivar una relación directa con los clubes salteando a las confederaciones y asociaciones de cada país. La relación Asunción-Zurich se enfrió, entonces, por la suma de varios elementos: el nuevo Mundial de Clubes, la designación de Macri sin previa consulta y, por último, la Asociación Mundial de Clubes que impulsó FIFA puenteando a Conmebol y UEFA.

Además, hubo un nuevo ingrediente hace pocos días: la cancelación del Consejo de la FIFA que iba a tener lugar en Asunción y que se desarrollará, justamente, en Zurich. Mediante una carta, Alejandro Domínguez denunció "discriminación" y "abuso de poder" de parte del organismo presidido por Gianni Infantino para con la Conmebol, criticando duramente los criterios utilizados para la suspensión del Consejo.

Domínguez, de gran relación con Mauricio Macri, no tenía ningún interés en su designación como titular de la Fundación FIFA. El sismo político generado por su nombramiento a nivel futbolero, continental y nacional terminó exponiendo una confrontación silenciosa que se veía desde hacía meses: entre el ex Presidente y Horacio Rodríguez Larreta por el liderazgo de una oposición nacional que, pocos meses después de las elecciones presidenciales, ya apunta al 2023.